Comer menos combate el envejecimiento cerebral
Comer menos, con una dieta rigurosa, estimula la presencia de una molécula que actúa directamente sobre la longevidad y el funcionamiento del cerebro.
Científicos de la Universidad Católica de Roma comprobaron que con una dieta estricta estimula a moléculas que mantienen joven al cerebro, lo cual confirma que la obesidad puede producir el envejecimiento prematuro del tejido cerebral.
Ensayando con ratones, los investigadores determinaron que el restringir las calorías se asocia no sólo con la longevidad, sino que mejora las capacidades cognitivas y reduce el comportamiento agresivo.
Se constató que el cerebro de los roedores que fueron sometidos a una rigurosa dieta se mantenía notablemente más joven que el del resto.
El análisis permitió identificar una molécula específica que se activa con la restricción de calorías y que desempeña un rol fundamental en la dinámica cerebral. Se trata de la CREB1, la cual activa genes ligados a la longevidad y a un funcionamiento más eficiente del cerebro, además de que ayuda a regular la memoria, el aprendizaje, y el control de la ansiedad. Y si bien la CREB1 ya había sido detectada, hasta ahora se ignoraba la correlación directa entre las dietas y su estimulación.
El estudio sugiere un beneficio en los ayunos practicados por místicos desde la antigüedad, siempre y cuando se realicen de forma responsable.