Espía entregó importante información de la FAP a Chile
Según la resolución judicial del caso del espía peruano Víctor Ariza, se conoció que este sujeto entregó a Chile importante información clasificada de la Fuerza Aérea del Perú, conteniendo, entre otros, la situación de la aeronaves y los planes de entrenamiento de los oficiales.
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Según la resolución judicial del caso del espía peruano Víctor Ariza, se conoció que este sujeto entregó a Chile importante información clasificada de la Fuerza Aérea del Perú, conteniendo, entre otros, la situación de la aeronaves y los planes de entrenamiento de los oficiales.
Según los documentos, en la computadora de Ariza se encontraron documentos valiosos, como la situación de las aeronaves de combate de la FAP, la exposición informativa de los objetivos de las unidades de la primera región territorial, el proyecto ‘Halcón’, tomas fotográficas de la documentación clasificada, el plan de entrenamiento de la FAP, el plan ‘Quiñones.
Uno de los programas que dio cuenta de estos detalles es ‘Día D’, que indicó que el contacto de dicho ex oficial de inteligencia FAP con Chile empezó el 3 de febrero del 2002, cuando éste fue nombrado auxiliar de la Agregaduría Aérea Peruana en Chile, cargo que ocupó por un año, tras lo cual regresó al Perú, a la Dirección de Inteligencia de la FAP.
La investigación a este sirviente de Chile comenzó en el 2007, el personal de inteligencia empezó a investigar a Ariza, cuando se descubrió un voucher a nombre de su esposa, con un depósito desde Chile. También se informó que Ariza viajó a Chile por dos años, sin permiso de la sus superiores.
Se encontraron depósitos bancarios del traidor hasta por 178 mil dólares, cifra que no guarda relación con su sueldo de 500 dólares mensuales.
El felón utilizaba a sus parejas sentimentales, su ex esposa Dora Margarita Paredes y su actual pareja Mary Lady Carrillo para canalizar estos fondos.
Uno de los implicados sería el oficial Víctor Buendía Rodríguez, quien ocupó el mismo puesto que éste en Chile, así como los militares FAP, Omar Flores Arrazabal y Justo Rufino Ríos Aguilar.
La FAP tendió un anzuelo al espía, quien cayó en la trampa y entregó a Chile la falsa información a la cual accedió, que daba cuenta de presuntas compras de aviones.
El atestado judicial precisa que “con la sorpresa que en la computadora personal y laptop de Víctor Ariza Mendoza existía documentación con la clasificación de SECRETO; la misma que por la naturaleza de la información dicho investigado no tenía por qué tenerla”.
“Dicha documentación está referida respecto: a) la Situación de Aeronaves de Combate FAP, b) Expediente de Inicio para Adquisición de Bienes en el Extranjero, c) la relación de carpetas que contienen documentación clasificada, d) apreciación de Inteligencia Estratégica de Bolivia, e) Exposición Informativa sobre los Objetivos de la Dirección de Inteligencia a las Unidades de la Primera Región Aérea Territorial, f) Proyecto Halcón, g) Exposición sobre la radarización del Espacio Aéreo Nacional de Argentina, g) Apreciación de Inteligencia de la Fuerza Aérea de Chile, i) tomas fotográficas de la documentación clasificada encontrada en sus archivos como el plan de entrenamiento de la FAP, j) Estructura operativa de la FAP, k) Plan Quiñones”.
Uno de los programas que dio cuenta de estos detalles es ‘Día D’, que indicó que el contacto de dicho ex oficial de inteligencia FAP con Chile empezó el 3 de febrero del 2002, cuando éste fue nombrado auxiliar de la Agregaduría Aérea Peruana en Chile, cargo que ocupó por un año, tras lo cual regresó al Perú, a la Dirección de Inteligencia de la FAP.
La investigación a este sirviente de Chile comenzó en el 2007, el personal de inteligencia empezó a investigar a Ariza, cuando se descubrió un voucher a nombre de su esposa, con un depósito desde Chile. También se informó que Ariza viajó a Chile por dos años, sin permiso de la sus superiores.
Se encontraron depósitos bancarios del traidor hasta por 178 mil dólares, cifra que no guarda relación con su sueldo de 500 dólares mensuales.
El felón utilizaba a sus parejas sentimentales, su ex esposa Dora Margarita Paredes y su actual pareja Mary Lady Carrillo para canalizar estos fondos.
Uno de los implicados sería el oficial Víctor Buendía Rodríguez, quien ocupó el mismo puesto que éste en Chile, así como los militares FAP, Omar Flores Arrazabal y Justo Rufino Ríos Aguilar.
La FAP tendió un anzuelo al espía, quien cayó en la trampa y entregó a Chile la falsa información a la cual accedió, que daba cuenta de presuntas compras de aviones.
El atestado judicial precisa que “con la sorpresa que en la computadora personal y laptop de Víctor Ariza Mendoza existía documentación con la clasificación de SECRETO; la misma que por la naturaleza de la información dicho investigado no tenía por qué tenerla”.
“Dicha documentación está referida respecto: a) la Situación de Aeronaves de Combate FAP, b) Expediente de Inicio para Adquisición de Bienes en el Extranjero, c) la relación de carpetas que contienen documentación clasificada, d) apreciación de Inteligencia Estratégica de Bolivia, e) Exposición Informativa sobre los Objetivos de la Dirección de Inteligencia a las Unidades de la Primera Región Aérea Territorial, f) Proyecto Halcón, g) Exposición sobre la radarización del Espacio Aéreo Nacional de Argentina, g) Apreciación de Inteligencia de la Fuerza Aérea de Chile, i) tomas fotográficas de la documentación clasificada encontrada en sus archivos como el plan de entrenamiento de la FAP, j) Estructura operativa de la FAP, k) Plan Quiñones”.
