Ensañado contra los trabajadores ancianos, la dictadura de Alberto Fujimori robó el dinero y el futuro no sólo de la seguridad social (IPSS) y la Caja del Pescador, sino también saqueó a la Caja de Pensiones Militar Policial, burlándose de ellos al decir que reconocía su sacrificio en la lucha antiterrorista, pero dejándolos a la deriva, como carga de sus familias en lugar de sostener su independencia con una pensión digna, con el agravante de que parte de ellos quedó discapacitado en acciones contra la delincuencia y la subversión.
Discapacitados de las FF. AA. y Policía Nacional en una marcha más exigiendo pensiones justas y sus derechos
La República informa así este 26 de abril de 2011:
Mafia hurtó 1.000 millones de soles a Caja Militar en el gobierno de Fujimori
Ni un solo centavo se ha conseguido recuperar de lo que se llevaron. Son más de 500 los procesados por los actos de corrupción, entre ex ministros del régimen de Fujimori , ex miembros de la cúpula militar y otros. Ver infografía sobre el desfalco de la caja militar.
María Elena Hidalgo.
La defensa legal de la Caja de Pensiones Policial Militar calcula en aproximadamente 1.000 millones de soles el monto desfalcado por la organización criminal encabezada por el ex asesor del presidente Alberto Fujimori, Vladimiro Montesinos, e integrada por la cúpula de las Fuerzas Armadas y un cogollo de empresarios mafiosos.
Ni un centavo de los fondos expoliados ha sido recuperado hasta el momento, lo que explica en gran parte por qué la Caja Militar se encuentra en una situación de colapso. “La Caja Militar ha sido una de las instituciones más afectadas por la corrupción durante el gobierno de Fujimori, sin embargo prácticamente no se ha conseguido retornar ni un solo sol de lo que se robó”, informó Robert Meza, abogado de la Caja Militar.
La Procuraduría Ad Hoc del Caso Fujimori-Montesinos reportó que son 21 los casos judiciales relacionados con el desfalco a la Caja Militar y que dichos procesos involucran a alrededor de 500 persona s, entre ex ministros del fujimorato, ex altos jefes militares, testaferros de Montesinos y una red de banqueros, financistas, brokers y empresarios vinculados con el ámbito de la construcción y la hotelería.
Business are business
El negociado más cuantioso que afectó los fondos de la Caja Militar es un préstamo ilegal que concedió esta entidad a favor de la compañía constructora Gessa Ingenieros, entonces gerenciada por Alberto Espantoso Pérez , por US$ 42 millones. El daño causado a la Caja Militar asciende a los 469.7 millones de soles, de acuerdo con la defensa legal de la institución.
Colima, la empresa de Luis y Wilfredo Venero Garrido, hermanos del testaferro de Montesinos , Víctor Venero, obtuvieron un crédito ilícito que representó una pérdida de 98 millones de soles.
La Caja Militar espera ganar estos juicios para recuperar en algo el dinero birlado por la mafia. Pero ha tenido reveses.
En un fallo sin precedentes, en el 2009 la Corte Suprema consideró que no hubo delito cuando la compañía Sagitario, de la familia Wiese Moreyra, le vendió a la Caja Militar por US$ 7.2 millones un terreno que seis meses antes había valorado en US$ 900 mil.
En esta operación participó Víctor Venero, pero la justicia concluyó que no hubo corrupción, lo que representó una gran pérdida económica para el organismo pensionario. “Esperamos recuperar en algo lo que robaron con los 17 casos que están en proceso judicial”, dijo Robert Meza.
Cifras
469.7 millones es lo que perdió la Caja Militar debido al préstamo ilegal que le hizo a la firma Gessa Ingenieros.
527 es el número de procesados por la veintena de casos relacionados con la corrupción en la Caja Militar.
“La Caja Militar fue la entidad más expoliada”
“La Caja de Pensiones fue virtualmente desmantelada durante el gobierno de Fujimori por una mafia que concertó el robo sistemático de los fondos y bienes con grandes empresarios”, dijo el procurador Pedro Gamarra Johnson .
”El operador principal era Vladimiro Montesinos que controlaba a los militares y policías que administraban la Caja Militar. Montesinos los presionaba para que aprobaran negocios que presentaban empresarios por intermedio de Víctor Alberto Venero. El que cobró las comisiones a los empresarios era otro testaferro, Juan Valencia Rosas”, explicó Gamarra.
En el caso de Juan Carlos Hurtado Miller, éste logró que Vladimiro Montesinos convenciera a los directivos de la Caja Militar para que aceptara como pago por una deuda de US$ 9 millones un terreno que valía cinco veces menos. Hurtado Miller aprovechó su condición de candidato fujimorista a la alcaldía de Lima para pedirle el favor a Montesinos, quien se lo concedió rápidamente. Ex directivos de la Caja admitieron ante la justicia que la orden efectivamente provino de Montesinos.