Dos indígenas fallecidos y 17 heridos deja el intento de toma de las instalaciones de la empresa PetroTal, que fue repelido por la Policía.
Foto: Andina
En la víspera, a las 23:30 horas, unos 70 pobladores, provistos de lanzas y retrocargas (perdigoneras), se presentaron en las afueras de la empresa Petrotal, demandado la paralización de las labores del referido campamento petrolero conocido como Lote 95, informa el Ministerio del Interior.
Las instalaciones de la empresa Petrotal se ubican en la localidad de Bretaña, región Loreto, dejó 6 efectivos policiales heridos al igual que 11 civiles y fallecieron dos pobladores, aún sin identificar, informó el Ministerio del Interior.
A través de un comunicado, dicho ministerio precisa que en la víspera, aproximadamente a las 23:30 horas, unos 70 pobladores, provistos de lanzas y retrocargas (perdigoneras), se presentaron en las afueras de la empresa Petrotal, demandado la paralización de las labores del referido campamento petrolero conocido como Lote 95.
Al no llegar a un acuerdo, los pobladores habrían realizado disparos impactando uno de los proyectiles en un efectivo policial, produciéndose un enfrentamiento.
Los 11 civiles heridos fueron evacuados vía fluvial hasta la ciudad de Requena para recibir atención médica. Cuatro de ellos fueron trasladados a la ciudad de Iquitos con pronóstico reservado. Se está dando prioridad a la evacuación y tratamiento de los heridos, indica el documento.
También añade que en todo momento, la Policía Nacional actuó con la finalidad de salvaguardar la integridad de la población y de los trabajadores de la empresa. Durante todo el desarrollo de los hechos estuvo presente una representante del Ministerio Público, señala.
El comunicado indica, además, que una comisión de alto nivel del Gobierno, liderada por el ministro de Cultura e integrada por representantes de diversos sectores, está viajando a la zona el día de hoy.
El Ministerio del Interior rechaza toda manifestación de violencia que atente contra la vida, la libertad de tránsito y la propiedad. La Policía Nacional continuará priorizando el diálogo y el respeto a los derechos humanos en sus intervenciones para restablecer el orden.
