Antofagasta, 06-07 junio, territorio mutilado y con el recuerdo de Arica (1880)
Capitán Eloy Villacrez
Dentro de unos días, el 06 de junio del presente, se programó la reunión presidencial, para formalizar el tratado del Pacífico, conformado por el Perú, junto a Colombia, Méjico, además de Chile y como observador Panamá. Un tratado más de integración. Los pormenores pueden ser importantes, pero lo cuestionable es el mensaje subliminal que se imprime a este acto.
Chile consideró que el mejor lugar para esta firma era Antofagasta; nos está diciendo que ese territorio que fue conquistado a sangre y fuego y mutilado de su propietario Bolivia hoy es mostrado como trofeo de guerra, producto de una confrontación que nos costó la perdida de Tarapacá hasta la fecha.
Este mensaje peruano es al soldado presidente, para recordarle que las instituciones castrenses fueron las únicas que anidaron la revancha; el estamento social y político “se olvidó” de nuestros muertos y del genocidio de nuestro pueblo en Tarapacá y la guerra arrasada en todo nuestro territorio.
Lo más bajo es que Chile escogió el día de la inmolación de Bolognesi, para dar un mensaje al mundo de su desprecio por los que dieron su vida para defender ese territorio. Rcordemos que la batalla de Arica comenzó con el bombardeo naval al puerto el 06 de junio de 1880; fue realmente cuando se inició el ataque chileno para la toma de Arica. Y el 07 mueren combatiendo Bolognesi y sus guerreros, en la sentencia que nos aplicó el enemigo, por nuestra incapacidad de organizar la defensa nacional frente a las apetencias del exterior.
Todo esto es conocido; por ello creemos que es insultante para nuestro ser nacional que se haya escogido ese día y ese lugar, y que nuestros representantes lo hayan aceptado; pudo haber sido el 08 de junio, hubiera sido menos traumático y de preferencia en otra ciudad más al sur. En esas condiciones, participar a nivel presidencial es hacer el juego subliminal a la diplomacia chilena justo en momentos en que se están dilucidando los derechos sobre el mar.
Es pertinente recordar que en la nueva doctrina de la ONU de descolonización determina, con la Resolución 1514 (XV), que la continuidad territorial es lo fundamental para mantener los derechos soberanos sobre los territorios arrebatados. Aunque la población nativa haya sido desaparecida, estaríamos en la misma condición de las Malvinas y Gibraltar. La existencia de cualquier tratado impuesto deja de tener significado. Este tema debe ser estudiado para hacer una propuesta juntamente con Bolivia, sería el camino natural para su salida al mar y la vuelta a la situación anterior a la guerra de 1879. El no tener fronteras con Chile nos permitiría vivir en paz y alcanzar el desarrollo.
Comandante Humala, si en caso aún conserva nuestra formación profesional, evite viajar a esa cita, le pedimos los soldados y patriotas en general.
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