"Los judíos árabes"
Por Isaac Bigio
El título de esta nota no es un sinsentido, pese a que la prensa mucho habla del conflicto entre Israel y su entorno. Los judíos antes de llegar a Occidente se concentraban en los actuales países árabes y muchos árabes practicaron el judaísmo siglos antes de que nacieran Jesús o Mahoma.
El idioma estatal más parecido al árabe es el hebreo y muchos de quienes hablan ambas lenguas tienen similares facciones. La mayoría de la población que vive en las tierras que detenta u ocupa Israel ha tenido o tiene al árabe como su primera lengua. En algún momento la mayoría de los judíos que llegaban a Israel provenían de las naciones árabes.
El autor de estas líneas se siente orgulloso de haber nacido en los Andes, de sus ancestros amerindios y negros y también de tener raíces árabes judías. Mi apellido se origina en el Medio Oriente y mis ancestros judíos vienen de Alepo (la segunda urbe de Siria que reclama ser la ciudad habitada más antigua del mundo).
Hasta antes del establecimiento de Israel todos los países árabes tenían milenarias y pujantes colectividades judías, las mismas que fueron étnicamente limpiadas. Hoy menos del 1% de los alrededor de 880,000 judíos que poblaban las naciones árabes en 1948 siguen residiendo en sus respectivas patrias ancestrales.
En los treintas un cuarto de los habitantes de Bagdad eran judíos y el primer ministro de Finanzas que tuvo este país rezaba en la sinagoga. Mientras los judíos de Europa tenían sus propios idiomas (el yiddish en Alemania y Europa oriental y el ladino en el Mediterráneo y otras partes), los judíos árabes hablaban la misma lengua de sus compatriotas.
Mi abuela Sara Bigio -con quien viví, de la que hoy se cumple 10 años de su fallecimiento y a quien dedico este artículo- era una practicante judía, aunque nunca habló hebreo. Su idioma materno y preferido era el árabe. Ella gustaba reunir a todos sus hijos y nietos para celebrar religiosamente cada noche de viernes el shabat judío, y toda la comida que ella magistralmente cocinaba era sirio-libanesa.
De Irak vienen Abraham (el padre de los israelitas), los judíos que reconstruyeron el templo de Salomón y luego los que durante el Medioevo escribieron el Talmud (el libro judío más sagrado después del primer testamento). En Egipto nacieron Moisés y los que poblarían y crearían Judea e Israel.
Mientras en Europa a los judíos se les redujo a guetos y persiguió, se les hizo pogromos y luego se les llevó a cámaras de gas, en el mundo árabe fueron más tolerados. La única gran civilización hispana que hubo antes de Colón fue hecha por los árabes y judíos que poblaron España.
De ésta y de otras partes del mundo árabe emergieron el álgebra, la química y muchas ciencias, que entonces reprimía el oscurantismo europeo.
Si los judíos, musulmanes y cristianos del Medio Oriente, que antes colaboraron para rescatar y revivir a los clásicos griegos, fuesen capaces de hacer una federación multiétnica en "Tierra Santa", la humanidad se beneficiaría de ello y los judíos árabes podrían volver a sus tierras o ayudar a dar paso a un Cercano Oriente democratizado, pujante y que no fuese nido de déspotas o terroristas.