Indulto a Fujimori: ¡qué tal poder el de Nakazaki!
por Herbert Mujica Rojas
El sábado por la tarde recibí el siguiente email enviado por el abogado César Nakazaki, según se lee en el documento, que subraya declaraciones del médico de cabecera de Alberto Fujimori, Alejandro Aguinaga, y que señala que la salud del procesado ex presidente “está seriamente comprometida”, brulote especulativo que se presta a mil interpretaciones, ninguna de las cuales justifica indulto o gracia presidencial. El domingo, 24 horas después, gran parte de la prensa escrita, televisiva y radial hacía eco en grandes titulares de la “precaria” situación del ex dictador preso. ¿Diseña Nakazaki con poder asombroso la agenda de los medios de comunicación?
Leamos:
El médico de cabecera del sentenciado Alberto Fujimori y congresista de Fuerza 2011, Alejandro Aguinaga, señaló esta tarde que la salud del ex presidente está “seriamente comprometida”.
Al cumplirse el tercer día de hospitalización de Fujimori Fujimori en el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), Aguinaga indicó que el líder fujimorista sufrió de “disconfort alimentario” lo cual produjo la pérdida de 18 kg. En la endoscopia que se le practicó por ello se le encontró una “gastritis erosiva severa” y heridas en toda la mucosa gástrica, según Aguinaga, que “merecen tratamiento intenso endovenoso”.
El médico, desde Lambayeque, indicó que el cuadro de lesiones cancerosas en la lengua se juntó con hipertensión, cálculos renales, quistes en el páncreas, gastritis y el problema psicológico “traducido en una depresión severa de la cual ya está siendo tratado” por la “situación de encierro”.
“Su salud está seriamente comprometida, es innegable. Desde mi punto de vista sí reúne las condiciones para un indulto humanitario pero lógicamente dentro del fujimorismo también pensamos que él es inocente (…) No lo hemos solicitado (el indulto)”, sentenció Aguinaga en Canal N.
Mientras tanto, adelantó que Fujimori Fujimori sería dado de alta este domingo, pero tendrá que verse su evolución. En caso así suceda, seguirá su tratamiento oral en la Diroes.”
El mensaje electrónico se dirige al doctor Guillermo Olivera Díaz y a este modesto periodista hasta en dos direcciones distintas lo que denota la atención precisa que usó el abogado Nakazaki a quien, dicho sea de paso, no conozco. Y como no soy persona importante, bien vale preguntarse ¿a cuento de qué me remitió el susodicho tal comunicación? ¿creería que tengo influencia en los medios? En realidad, a tenor de lo acontecido quien sí las tiene obvias y efectivas cuanto que muy sintonizadas, es Nakazaki por los titulares del domingo.
El plan del fujimorismo es muy claro: hay que procurar la ternura de los hombres de prensa con el fin de alcanzar el indulto vía la gracia presidencial y conviene presentar al ex jefe de Estado como un individuo al que hay que tenerle consideración por salud precaria. Siento decepcionar al doctor Nakazaki pero mi opinión, humilde, personal, invariable sobre Alberto Kenya Fujimori sigue siendo la misma desde hace largos años: un procesado sobre el que debe caer todo el peso de la ley. Hasta la fecha no hay un estudio integral del daño impresionante que su régimen inmoral y coimero, causó al espíritu nacional. No hay un recodo que se haya salvado del enlodamiento en delitos y basura al por mayor que su administración perpetró contra el Perú.
No podemos desconocer que aún hay muchos venales supérstites camuflados en los medios de comunicación y que hoy disimulan sus pasados de vergonzoso maridaje comprado con el billete de Fujimori-Montesinos. Es cierto que en Perú poderoso señor es Don Dinero, pero también es verdad acrisolada que ¡No todos! tenemos esa fragilísima concepción inmoral del quehacer informativo y que llamamos al pan, pan; y al vino, vino; y al delincuente, delincuente. No debieran olvidarlo los que compran conciencias: ¡no todas están en venta!
No podría contestar por el doctor Guillermo Olivera Díaz pero sus demoledores ataques en forma de artículos de opinión sobre Fujimori, sus hijitos y aquél gobierno, hablan por sí mismos y estoy cierto que tampoco podrían conmoverle o esquinarle a poner “en valor”, (huachafería del peor gusto posible), sus servicios de defensa profesional penal en que es reconocido como uno de los más brillantes sino el más, en Perú.
La gárrula demostración de poder entre lo anticipado y las noticias del domingo dan cuenta fehaciente que el fujimorismo y las prácticas del montesinismo sobreviven en su odioso predicamento. ¿Deberíamos descartar la danza de miles de dólares para el mismo propósito? No lo creo.