Cuando se analizan las encuestas recientes sobre la evolución de los salarios, la pobreza y la desigualdad, la conclusión es la siguiente: a pesar del crecimiento económico, se han ampliado las brechas entre ricos y pobres.
Comencemos por la participación de los salarios en el PBI. Según el INEI, esta bajó del 30.1% en 1991, al 25.1% en el 2001. Y siguió bajando hasta el 21.8% en el 2006, en los años del boom económico. Como cada 1% del PBI equivale a US$ 1,100 millones, el poder adquisitivo de los asalariados fue menor en US$ 9,130 millones en el 2006, comparado con 1991. De otro lado, la participación del excedente de capital creció en la misma proporción (ver "Boca de Cocodrilo", www.cristaldemira.com, 12/11/07).
El Informe Técnico "Medición de la Pobreza" del Inei (agosto 2007), dice que la pobreza total promedio baja del 48 al 44% del 2004 al 2006. Pero eso esconde diferencias importantes: del 2004 al 2006, la pobreza baja en la costa (del 35.1 al 28.7%) y se estanca en la sierra en niveles altísimos (del 64.7 al 63.4%) y selva ( 57.7 a 56.6%). En varias regiones de la sierra, la pobreza aumenta: Huancavelica (del 84.8 al 88.7%), Apurímac (del 65.2 al 74.8%), Ayacucho (65.9 a 78.4%), Pasco (65.7 a 71.2%).
Raúl Mauro, de Desco, ha analizado el Informe Técnico del Inei (las Encuestas de Hogares) y encuentra que el coeficiente de Gini (que mide la desigualdad, siendo 100 la mayor y 0 la menor) pasó de 42.21 en el 2004 a 42.29 en el 2005, llegando a 43.13 en el 2006. La medición de Mauro es distinta a la de CEPAL (cuyos coeficientes Gini son mayores), pero lo importante es la tendencia. En pleno crecimiento económico, la desigualdad aumenta.
Javier Escobal, de Grade, analiza una promesa del presidente García en su discurso del 28 de julio pasado, que ha sido poco comentada. Dijo García: "como consecuencia, en el 2011, la distancia entre el 20% más rico del Perú y el 50% más humilde se habrá reducido en la mitad de lo que es ahora y el Perú será mucho más justo." Al analizar Escobal la encuesta ENAHO 2006, encuentra que dicha distancia es 4.4 veces (cifra enorme). Y tendría que reducirse en 50%, o sea a 2.2 veces para el 2011.
Pero, ¿qué sucedió entre el 2002 y el 2006 (años de crecimiento)? Dice Escobal que esa distancia era de 3.3 en el 2002: "bajo esta mención, aparte de otras que pudiera haber, el país se ha hecho más inequitativo", (SEPIA 2007, Mesa especial : ¿Por qué no se reduce la pobreza rural en el Perú?, www.sepia.org.pe). Concluye Escobal "no hay en las políticas públicas ninguna política concreta que nos haga pensar que esa meta concreta de reducción de la distancia puede llevarse a cabo".
Yendo al análisis de las relaciones entre desigualdad y pobreza, Fernando Eguren, de Cepes, nos dice: "Por lo general la condición de pobreza es un resultado de desigualdad y no a la inversa No es que porque se reciba pocos ingresos y se tenga menor capacidad de gasto, es que hay desigualdad. Esta existe porque hay diferentes canales de no integración, de marginación, de concentración de activos, etc. Porque hay desigualdad, hay pobreza" (Sepia, ídem).
Eguren agrega: "sería importante hacer encuestas que, además de los pobres, incluyan a todos los estratos y también a los más ricos, estableciendo correlaciones en el tiempo: ¿Cómo evolucionan los más ricos y los más pobres? ¿Hay algún tipo de relación de correlación en esta evolución? ¿Qué explican estas correlaciones? Hasta donde sé, esa información no se recoge por una razón (fuera de las políticas que puedan haber): los ricos no querrían contestar una encuesta de esta naturaleza" (SEPIA, ídem).
Ciertamente, si la mayoría de agujas de pobreza y desigualdad apuntan hacia el sur, es porque la bonanza macroeconómica se concentra en la costa y en los sectores más ricos. Y la actual política económica, que es la de Fujimori, sigue en lo mismo, profundizando las desigualdades.
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