Terminó con éxito el rescate de los 12 niños y el entrenador atrapados desde hace más de dos semanas en una cueva de Tailandia. Todos están fuera de peligro, aunque bajo observación médica todavía.
Para el rescate se requirió más de un millar de personas. Cuatro salieron el domingo, cuatro el lunes y cinco este martes. Un factor que no ayudó a acelerar la operación fue la fuerte lluvia en la zona.
La principal dificultad fue lo largo de las cavernas y sus pasos de agua total, lo cual representaba un riesgo debido a la falta de visibilidad y oxígeno. El esfuerzo costó la vida de un buceador experimentado de la Marina tailandesa.
Finalmente se optó por sacar a cada chico con dos buzos, uno de guía adelante y otro atrás. Los rescatados fueron vestidos con traje de buzo y se les dio un tranquilizante para evitar que el pánico pueda ser obstáculo para su salida.
Debido a que los menores deben permanecer en cuidado médico, no podrán aceptar la invitación de la FIFA para asistir a la final del Mundial de Fútbol en Rusia. "La misión aún no está completada, todavía nos queda enviarlos con sus familias", ha explicado Narongsak al dar por concluida la etapa de salvamento, informan agencias.
Los menores tienen de 11 a 17 años y son del club de fútbol "Jabalíes salvajes". Junto con su entrenador, de 26 años, se internaron en la cueva el sábado 23 de junio después de un entrenamiento. Una súbita tormenta inundó la cavidad, les cortó la salida y les obligó a internarse por las galerías a más de cuatro kilómetros de la entrada, hasta encontrar un lugar a salvo de la inundación.
El interés suscitado por el caso ya ha llevado a una productora de cine al lugar para recopilar información para la realización de una película.