Venezuela rechaza injerencia del Grupo de Lima en su política interna y hasta en caso jurídico sobre sus límites Ante la estrafalaria actitud de la Cancillería del Perú y el Grupo de Lima, conformado por varios países de la región, el gobierno de Venezuela rechazó la declaración de dicho grupo, pues se inmiscuye no sólo en política interna venezolana sino que, irracionalmente, hasta pretenden sustituir a tribunales internacionales al pronunciarse sobre los límites territoriales de Venezuela, definiendo a qué país pertenecen los territorios del Esequibo, que reclama el vecino país de Guyana.

Es una locura de las cancillerías que suscriben la Declaración de Lima. ¿Qué dirían Rusia o Japón si otro país se inmiscuye para declarar que las islas Kuriles pertenecen a Rusia o a Japón?  ¿Qué ha hecho pensar al Grupo de Lima que puede pronunciarse sobre una disputa limítrofe entre dos países, donde no han sido llamados?

A continuación, el comunicado del gobierno venezolano sobre dicha Declaración de Lima:

Venezuela rechaza declaración del autodenominado Grupo de Lima

La República Bolivariana de Venezuela expresa su mayor perplejidad ante la extravagante declaración de un grupo de países del continente americano que, tras recibir instrucciones del gobierno de Estados Unidos a través de una videoconferencia, han acordado alentar un Golpe de Estado en Venezuela, en un hecho sin parangón en la historia de la región, al intentar desconocer tanto el Gobierno democráticamente electo como a las instituciones legítimamente constituidas, llegando al extremo de pretender modificar los límites territoriales del país, atribuyendo territorio indiscutidamente venezolano a una nación vecina, interviniendo en una controversia territorial de exclusivo alcance bilateral.

Sobre el particular, la República Bolivariana de Venezuela tiene a bien informar que el próximo 10 de enero, el Presidente Nicolás Maduro Moros tomará posesión legítima y constitucional de la Presidencia de la República para el período comprendido entre los años 2019 y 2025, en perfecta sintonía en tiempo y en forma con lo establecido en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, para lo cual no requiere la venia de ningún gobierno extranjero.El mundo ha sido testigo de cómo el pasado 20 de mayo de 2018, en Venezuela se celebraron elecciones presidenciales, con una amplia participación popular contando con la concurrencia de diversos candidatos en representación de un número aún superior de partidos políticos, resultando vencedora la candidatura de Nicolás Maduro Moros, con una margen superior al 67% de los votos válidamente emitidos.

Este proceso electoral contó con la presencia de más de doscientos acompañantes nacionales e internacionales, y durante su desarrollo fue objeto de dieciséis auditorías públicas que han dado fe de la justeza de sus resultados, sin que consten en las instituciones venezolanas impugnaciones de ninguna naturaleza por parte de los participantes que no resultaron favorecidos por el voto popular.

Consecuentemente, la inmensa mayoría de los países del mundo han expresado su reconocimiento a esta elección y su felicitación al Presidente Maduro. Se trató, ni más ni menos, de un proceso electoral que contó con idénticas garantías y condiciones que aquellas elecciones parlamentarias de las cuales derivó la actual Asamblea Nacional, incluso dirigidas por las mismas autoridades del Poder Electoral, en razón de lo cual, las autoridades surgidas de ambos comicios cuentan con idéntica legitimidad.

Más allá de esta declaración,  del autodeterminado Grupo de Lima que ha escrito una vergonzosa página en la historia de las relaciones internacionales de la región, la República Bolivariana de Venezuela sabrá responder, a la luz del principio de la reciprocidad, a las acciones que individualmente decida tomar cada país, en la proporción correspondiente y en el terreno que cada uno escoja. Conviene recordar que a lo largo de su gloriosa historia como nación, ningún país o coalición de países ha logrado, ni logrará, intimidar al heroico pueblo venezolano, heredero de la más grande estirpe libertaria del continente americano.

Caracas, 4 de enero 2019  

 

Artículos relacionados

López Obrador: situación de Venezuela es un “asunto interno”

La cleptocracia peruana exige democracia para Venezuela