Buscan aniquilar a la población de Gaza no sólo con bombas y hambre, sino también sin atención médica
El ejército israelí ha allanado una vez más el Hospital Kamal Adwan, en el norte de la Franja de Gaza, y ha secuestrado brutalmente a personal médico y pacientes.
Tropas israelíes alineando a los secuestrados en el Hospital Kamal Adwan, en el norte de la Franja de Gaza, 19 de noviembre de 2024.
La incursión militar israelí ha tenido lugar este miércoles y, conforme a imágenes publicadas en las redes sociales, personal, pacientes y heridos, incluidos ancianos, con los ojos vendados y desnudos, esperan en filas bajo la vigilancia de los soldados sionistas para, lo que parece, subir a un camión.
Las familias de las víctimas no saben dónde han sido llevados los secuestrados.
“Es como si los estuvieran llevando a un matadero”, escribió un medio de comunicación de la Resistencia y avisó del secretismo impuesto por el ejército israelí en relación con los secuestros.
El régimen israelí ha atacado el hospital Kamal Adwan en numerosas ocasiones desde octubre del año pasado, cuando sumió a toda Gaza en una guerra genocida. Para justificar sus redadas, las autoridades sionistas alegan que las instalaciones albergan a combatientes de la Resistencia y su equipo. De hecho, ha intensificado esta práctica en los últimos 45 días, en particular en el norte de Gaza.
Prisioneros, que fueron liberados tras ser secuestrados por fuerzas israelíes de un hospital, han contado detalles horribles de su cautiverio, como el sometimiento a severas torturas.
El Ministerio de Salud de Gaza, al denunciar una reciente redada israelí en el hospital Kamal Adwan, dijo que las fuerzas sionistas apuntaron específicamente a la oficina administrativa y al personal de Kamal Adwan sin justificación, y señaló que dispararon intensamente a la oficina del director del hospital.
“Dos médicos del hospital perdieron a sus familias enteras cuando la ocupación masacró a sus esposas e hijos en un crimen atroz que avergüenza a la humanidad”, lamentó el Ministerio.
La institución gazatí pidió a la comunidad internacional que actúe para proteger los hospitales y garantizar la seguridad de los equipos médicos, y trabajar para restaurar y reabrir las instalaciones médicas “antes de que sea demasiado tarde”.
Señaló que ningún hospital estaba a salvo de la agresión del régimen en toda la franja costera y confirmó que el régimen había destruido docenas de instalaciones y otros centros médicos y los había dejado completamente fuera de servicio.
“La ocupación ataca deliberadamente a los equipos médicos y hasta la fecha ha ejecutado a más de 1000 médicos, enfermeras y trabajadores sanitarios en Gaza”, reiteró el Ministerio.
El Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), ha condenado el silencio mundial sobre la actual “limpieza étnica” en la sitiada Franja, tras el mortífero bombardeo israelí del Hospital Kamal Adwan.
Las autoridades sanitarias gazatíes confirmaron que el número de palestinos muertos tras un año de guerra ha aumentado a 43 972 víctimas mortales, además de otras 104 000 personas heridas. La mayoría de las víctimas son mujeres y niños.
Con información de Hispantv, 20.11.2024