Convengamos en primer lugar que el Gobierno de Nicolás Maduro ha sido uno de los más nefastos, entreguistas e ineficientes en la historia venezolana, más allá de la guerra económica interna y externa y de los bloqueos, y es que a pesar de la cada vez menor disposición de recursos económicos para la inversión en diversos aspectos en Venezuela, la corrupción ha sido elevada y ha permeado notablemente a numerosos organismos e instituciones, por ejemplo. Ahora bien, es inconcebible que ante la crisis socioeconómica que afecta a la nación suramericana, haya quienes pidan a gritos la intervención militar foránea, específicamente la de las fuerzas armadas estadounidenses, creyendo que así se resolverá la difícil situación. Por ignorancia en su mayor parte, creen estos individuos que soldados estadounidenses y de países como Colombia y Brasil, junto a mercenarios extranjeros y venezolanos, vendrán a liberarnos de la tiranía, deteniendo a algunos funcionarios chavistas-maduristas y asesinando a otros, con un mínimo de derramamiento de sangre y daño colateral inexistente. Y una que otra persona que desea la invasión sí admite la posibilidad de que haya una gran destrucción y una alta mortandad, pero consideran que es necesario para eliminar a Maduro y muchos de sus seguidores.

Además, el presidente de Uruguay respaldó a Nicolás Maduro como su homólogo en Venezuela y rechazó el reconocimiento del autoproclamado "presidente encargado", Juan Guaidó.

El presidente de UruguayTabaré Vásquez, afirmó este viernes que el país que administra no es neutral ante la problemática en Venezuela, y que su Gobierno apoya la democracia y aboga por una solución pacífica.

La aviación de la coalición internacional liderada por EEUU lanzó un ataque con bombas de fósforo blanco, una sustancia prohibida por los acuerdos internacionales, a unas granjas en las cercanías de la ciudad de Al Baguz situada en la provincia siria de Deir Ezzor, informó la agencia SANA.

Según las fuentes locales, el ataque se perpetró cerca de las fronteras sirio-iraquíes bajo el pretexto de la lucha antiterrorista poniendo en riesgo la vida de cientos de civiles y personas secuestradas por los yihadistas.

Rusia critica en duros términos a EE.UU. por la ‘interferencia descarada’ en los asuntos internos de Venezuela, instrumentalizando la supuesta ‘ayuda humanitaria’.

“La incitación y la influencia externa destructiva, e incluso bajo el pretexto hipócrita de prestar ayuda humanitaria, no tiene nada que ver con el proceso democrático”, reprobó el sábado el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, conforme recogió la agencia estatal local de noticias TASS.

El protector del estado venezolano de Táchira alerta de los preparativos de una incursión de mercenarios en Venezuela y acusa a los EE.UU. y ACNUR de apoyar el plan.

“Quiero denunciar ante la comunidad internacional (…) que se prepara una modalidad de guerra contra Venezuela, que no es una guerra abierta de Ejército de un Estado contra otro Estado, tampoco la incursión directa de tropas norteamericanas al estilo que estábamos acostumbrados, sino una modalidad de causar el caos interno mediante la incursión de paramilitares, mercenarios y (…) algunos traidores que han encontrado precio en Colombia”, indicó el viernes Freddy Bernal en una entrevista a la cadena multinacional Telesur.

El diputado del Partido Demócrata Ted Deutch, cuestionó la política de "cero tolerancia" impulsada por el presidente Donald Trump, tras documentar casos de agresiones sexuales contra menores no acompañados detenidos en centros migratorios.

Miles de menores de edad han sido víctimas de abuso sexual en los centros de detención para migrantes instalados de EE.UU., en los últimos tres años. Entre los presuntos responsables de esas agresiones figuran 154 empleados del Gobierno, recoge NBC.

El congresista Ted Deutch en una manifestación, en Washington D.C., EE.UU, 11 de febrero de 2019. / Tasos Katopodis / AFP

​​​​​​​Un informe desvela que las pruebas nucleares que realizó EE.UU. en las Islas Marshall generaron cáncer y aborto para los pueblos de esta región.

Entre los años 1946 y 1958, EE.UU. llevó a cabo 67 pruebas nucleares en las Islas Marshall —en el océano Pacífico— sobre todo en el Atolón Bikini, indica un informe publicado esta semana por el diario estadounidense Daily Beast, y denuncia que los efectos de estos ensayos fueron horribles.

La explosión “Baker”, parte de una prueba nuclear de EE.UU. en el Atolón Bikini, en las Islas Marshall, la región de Micronesia, 25 de julio de 1946.