Fiscalía en silencio tras revelación de Wikileaks sobre gobierno de García y tala ilegal de caoba

camion_troncos_madera.jpgTras la revelación de Wikileaks que asegura que el Gobierno de Perú admitió en secreto que entre el 70 y el 90% de sus exportaciones de caoba provenían de la tala ilegal y que Alan García consentía la emisión de certificados falsificados, la Fiscalía de la Nación permanece en silencio sobre esta denuncia.

Como se sabe, según un cable de la embajada de Estados Unidos filtrado por Wikileaks, el Gobierno de Perú sabe de este tráfico de madera fuera de los límites de las concesiones y los vínculos con los sobornos.

La revelación pone en evidencia a varias tiendas de bricolaje estadounidenses, que han admitido a Survival International que siguen importando maderas nobles de la Amazonia. Home Depot, Lowe's y Lumber Liquidators han confirmado que usan dicha madera en sus productos.

El entonces embajador de los EE. UU. En el Perú, James Struble, citó “estimaciones no oficiales de INRENA” en el telegrama de 2006 (INRENA era el Instituto de Recursos Naturales del Gobierno).

Los comentarios del embajador presentan una imagen muy negativa de la mala administración de las selvas y bosques de Perú. Según el cable, EE. UU. importó el 88% de las exportaciones de caoba de Perú en 2005, y por tanto juega un papel principal en el amplio comercio maderero ilegal del país. La mayoría de caoba que queda, en peligro de extinción, sigue siendo destinada a los EE. UU. hoy en día.

Esta noticia se produce pocas semanas después de que la tala ilegal en Perú saltara a los titulares internacionales después de conocerse que los madereros se han infiltrado en zonas protegidas habitadas por indígenas no contactados, lo que los ha empujado a cruzar la frontera con Brasil.

Los madereros suponen una seria amenaza para los indígenas murunahua aislados, que podrían ser aniquilados por las enfermedades traídas por los foráneos o enfrentarse a conflictos violentos con otros pueblos indígenas si se los expulsa de sus tierras.

Survival ha instado al Gobierno peruano a que asegure la debida protección del territorio murunahua.

Además de los delitos ambientales, se estaría perpetrando delitos de falsificación de documentos bajo la modalidad de asociación ilícita para delinquir.

El ministro Antonio Brack Egg salió a decir que los Wikilealks son de 2006 y que ahora la situación está bajo control, pero, ¿es suficiente la palabra de un ministro que ha perdido credibilidad?  ¿Por qué el silencio de la Fiscalía?  ¿No le interesa el ambienta a la Fiscal de la Nación o hay poderosos intereses palaciegos que buscan silenciar este grave problema?