PNUD: millones de todos los peruanos que burlan la fiscalización
Ya van 13 millones gastados sólo en publicidad, sin contar las planillas doradas
Para felicidad de los derrochadores o corruptos, el día de ayer, cuando concurrió al Congreso el jefe del gabinete ministerial, Jorge Del Castillo, acompañado por otros ministros, provocó a los legisladores, quienes cayeron en la trampa de retirarse, con lo que se frustró la sesión, en un episodio que agrava la ya débil capacidad fiscalizadora del Congreso.
En la truncada sesión, no obstante, se llegó a denunciar que desde el 2006 ya suman 13 los millones gastados mediante la trampa del PNUD sólo en publicidad.
Anteriormente ya se conocía la danza de favores que se pagaban a allegados del gobierno, con suculentos sueldos de varios miles de dólares en planillas doradas de diversas entidades estatales. Ahora, con la publicidad se mantiene a una prensa corrupta, continuadora del geishismo de la dictadura fujimontesinista, ansiosa de acaparar la loca propaganda estatal, que sólo sirve para promover a los ministros incapaces y al mismo Presidente de la República.
En el Perú, con todos estos escándalos, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se está prestando para avalar un descarado dispendio de los fondos que no son de la ONU (pues la ONU sólo funge de administradora), sino de todos los peruanos, son unos fondos que por ahora son considerables, pero que deberían emplearse bien, porque este tiempo de bonanza va a tener su fin.
El PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) fue concebido como un medio de promover proyectos de lucha contra la pobreza, contra el hambre, contra la exclusión social.
En el Perú el PNUD se ha convertido en un arma de la lucha contra la pobreza, ¡sí!, contra la pobreza de burócratas incapaces que, a falta de talento, necesitan buscar la riqueza enrolándose en el ejército de sirvientes y validos del gobierno mediante planillas doradas o jugosas consultorías. No decimos empleados, sino sirvientes o validos, porque estos sujetos, como saben en su conciencia que no han ganado con juego limpio su sueldo, se sienten obligados a pagar el favor al gobierno de turno con una fidelidad servil, que se convierte en cómplice de cualquier exceso o acto de corrupción que pueda suceder en su entorno.
Una de las artimañas que emplean estos burócratas dorados para parasitar por tiempo indefinido el aparato estatal es no dejar protocolos (como suele suceder en otras profesiones, como la medicina, la ingeniería, el derecho, etc.), de manera que cualquiera continúe con claridad el trabajo. La premeditada ausencia de protocolos allana el camino para fabricar la necesidad de contratar “salvadores” que remediaran los males de la administración pública.
Pero el PNUD también se ha convertido en apetecida sangre que las sanguijuelas de la prensa corrupta succiona para sobrevivir, allí los tenemos silenciando la corrupción y aplaudiendo los atropellos del poder ejecutivo.
La factura del famoso spot de Montesinos contra el paro ya estaba en la puerta del horno para ser pagada con fondos del PNUD, como claramente lo decía el documento. Al verse descubiertos, Del Castillo y Mauricio Mulder salieron a decir que se pagará con dinero del Partido Aprista, burlándose así de todos los peruanos y de los propios militantes apristas, que han visto a su partido transformado en fangoso chiquero en el cual toda corruptela y engaño es posible.
Si existen todavía políticos decentes, lo que deberían pedir de una vez por todas es ERRADICAR el PNUD del Perú, pues todo el dinero de las arcas públicas debe pasar por los filtros de la ley de presupuesto y de la transparencia que la ciudadanía requiere para fiscalizar el empleo de SU dinero.
No hay excusa que valga, porque de haber algún buen proyecto que sea restringido por la ley del presupuesto, siempre habrá una salida legal para sacarlo adelante, CON TRANSPARENCIA. Si hay alguna luminaria que necesite ser remunerada con suculentos sueldos, por encima de toda la burocracia, entonces aprobemos una buena ley de carrera pública, toda la ciudadanía querrá conocer con avidez las extraordinarias cualidades que adornan a tales genios, que deberían ser ejemplo de la niñez y la juventud. Las lámparas no se colocan bajo la cama, como dice la Escritura; no necesitamos de la sordidez en que se envuelve el PNUD con el pretexto de ayudar a los más pobres.
No obstante, a la ONU parece no importarle lo que se perpetra en su nombre. Desde que estuvo en la cabeza de este organismo Kofi Annan se conocía de escándalos de corrupción de su entorno familiar, relacionados con la ONU. ¿De qué sirve la ONU? Si no ha sido capaz de evitar los crímenes de Afganistán, Irak, Sudán, ni será capaz de detener acciones homicidas en Irán, ¿de qué sirve? En el Perú estamos comprobando que sólo sirve de infame excusa para derrochar el dinero de todos los peruanos, bajo el pretexto de la lucha contra la pobreza. ¡Basta ya de traficar con la pobreza!
Anteriormente ya se conocía la danza de favores que se pagaban a allegados del gobierno, con suculentos sueldos de varios miles de dólares en planillas doradas de diversas entidades estatales. Ahora, con la publicidad se mantiene a una prensa corrupta, continuadora del geishismo de la dictadura fujimontesinista, ansiosa de acaparar la loca propaganda estatal, que sólo sirve para promover a los ministros incapaces y al mismo Presidente de la República.
En el Perú, con todos estos escándalos, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) se está prestando para avalar un descarado dispendio de los fondos que no son de la ONU (pues la ONU sólo funge de administradora), sino de todos los peruanos, son unos fondos que por ahora son considerables, pero que deberían emplearse bien, porque este tiempo de bonanza va a tener su fin.
El PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) fue concebido como un medio de promover proyectos de lucha contra la pobreza, contra el hambre, contra la exclusión social.
En el Perú el PNUD se ha convertido en un arma de la lucha contra la pobreza, ¡sí!, contra la pobreza de burócratas incapaces que, a falta de talento, necesitan buscar la riqueza enrolándose en el ejército de sirvientes y validos del gobierno mediante planillas doradas o jugosas consultorías. No decimos empleados, sino sirvientes o validos, porque estos sujetos, como saben en su conciencia que no han ganado con juego limpio su sueldo, se sienten obligados a pagar el favor al gobierno de turno con una fidelidad servil, que se convierte en cómplice de cualquier exceso o acto de corrupción que pueda suceder en su entorno.
Una de las artimañas que emplean estos burócratas dorados para parasitar por tiempo indefinido el aparato estatal es no dejar protocolos (como suele suceder en otras profesiones, como la medicina, la ingeniería, el derecho, etc.), de manera que cualquiera continúe con claridad el trabajo. La premeditada ausencia de protocolos allana el camino para fabricar la necesidad de contratar “salvadores” que remediaran los males de la administración pública.
Pero el PNUD también se ha convertido en apetecida sangre que las sanguijuelas de la prensa corrupta succiona para sobrevivir, allí los tenemos silenciando la corrupción y aplaudiendo los atropellos del poder ejecutivo.
La factura del famoso spot de Montesinos contra el paro ya estaba en la puerta del horno para ser pagada con fondos del PNUD, como claramente lo decía el documento. Al verse descubiertos, Del Castillo y Mauricio Mulder salieron a decir que se pagará con dinero del Partido Aprista, burlándose así de todos los peruanos y de los propios militantes apristas, que han visto a su partido transformado en fangoso chiquero en el cual toda corruptela y engaño es posible.
Si existen todavía políticos decentes, lo que deberían pedir de una vez por todas es ERRADICAR el PNUD del Perú, pues todo el dinero de las arcas públicas debe pasar por los filtros de la ley de presupuesto y de la transparencia que la ciudadanía requiere para fiscalizar el empleo de SU dinero.
No hay excusa que valga, porque de haber algún buen proyecto que sea restringido por la ley del presupuesto, siempre habrá una salida legal para sacarlo adelante, CON TRANSPARENCIA. Si hay alguna luminaria que necesite ser remunerada con suculentos sueldos, por encima de toda la burocracia, entonces aprobemos una buena ley de carrera pública, toda la ciudadanía querrá conocer con avidez las extraordinarias cualidades que adornan a tales genios, que deberían ser ejemplo de la niñez y la juventud. Las lámparas no se colocan bajo la cama, como dice la Escritura; no necesitamos de la sordidez en que se envuelve el PNUD con el pretexto de ayudar a los más pobres.
No obstante, a la ONU parece no importarle lo que se perpetra en su nombre. Desde que estuvo en la cabeza de este organismo Kofi Annan se conocía de escándalos de corrupción de su entorno familiar, relacionados con la ONU. ¿De qué sirve la ONU? Si no ha sido capaz de evitar los crímenes de Afganistán, Irak, Sudán, ni será capaz de detener acciones homicidas en Irán, ¿de qué sirve? En el Perú estamos comprobando que sólo sirve de infame excusa para derrochar el dinero de todos los peruanos, bajo el pretexto de la lucha contra la pobreza. ¡Basta ya de traficar con la pobreza!