nadine heredia 11Preguntada por el escándalo de la agresión matonesca perpetrada por el ministro de Trabajo, José Villena, contra una empleada del aeropuerto de Arequipa y otros trabajadores, a quienes amenazó despedir, la primera dama. Nadine Heredia, se lanzó contra la víctima y defendió a Villena.

Heredia, astutamente, sin nombrar a la empleada Ana Lucía Ramos (sobre quien el certificado médico indica que sufrió un moretón y presenta fuerte dolor en un brazo), la criticó diciendo que si las mujeres están seguras de una agresión no deben retirar la denuncia. Para disimular su ataque a la empleada, la Primera Dama, con su acostumbrada ambigüedad y estilo de indirectas, se explayó con tono de defensora de las mujeres, como quien hace campaña exhortando a no retirar las denuncias o, peor aún, como quien pone en duda la agresión para favorecer a Villena.

En ningún momento expresó su solidaridad con la agraviada ni con los trabajadores amenazados con despido por Villena, quien los filmó para acentuar su amenaza.

En cambio, refiriéndose a Villena, quiso dar la impresión de cuestionarlo diciendo que se trata de un acto "reprochable" su conducta, pero de inmediato pasó a la defensa del matón diciendo que Villena aseguró que no agredió físicamente a la empleada de LAN, Ana Lucía Ramos Mariscal, cuando hay testigos y cuando no es la única trabajadora objeto además de agresión verbal.

Continuó con la defensa de Villena diciendo que se disculpó de manera pública y privada, como si una disculpa pudiese borrar amenazas y hasta agresión por parte de una autoridad principal contra los trabajadores, y siguió defendiéndolo diciendo nuevamente que viajó a Arequipa a disculparse, “se siente arrepentido”, dijo y agregó por tercera vez que Villena se disculpó.  Tanto habla Heredia de las disculpas que parece ser la autora del vergonzoso libreto del ministro, disculpándose, pero sin renunciar.

Que Villena negó la agresión lo dijo dos veces.

Sobre el hecho de que Villena dijo en el aeropuerto que tenía orden del Presidente de detener el avión, Heredia se quedó callada, cuando más bien, en lugar de tratar de salvar a Villena debería defender a su marido de tal afirmación, pues Villena se expresó de Humala. en Arequipa, como de un loco que manda parar un vuelo para que recoja a un minsitro que llega tarde.

"El ministro negó las agresiones físicas, pero hay un parte médico (el certificado que prueba las lesiones) y se tiene que empezar a dilucidar, en todo caso él (Villena) tendrá que dar las explicaciones en las instancias que correspondan, entiendo que está corriendo una interpelación en el Congreso y él tendrá que asistir a esa interpelación", dijo.

En tanto, el presidente Humala, siguiendo su costumbre de reacciones tardías, sigue guardando silencio sobre el ministro pega-mujeres, quizás, esperando que sea el Congreso el que pida la salida de Villena en interpelación.

Por su parte, el presidente del Consejo de Ministros, Juan Jiménez, muestra una conducta errática y sin principios, pues primero defendió al matón diciendo que con la disculpa todo está superado, pero ahora dice que eso se está analizando.