Por caso Martín Belaunde Lossio
La exprocuradora Yeni Vilcatoma, quien fue despedida por enfrentar la intromisión del ministro de Justicia Daniel Figallo con la intención de beneficiar al prófugo Martín Belaunde Lossio, amigo del presidente Ollanta Humala y su cónyuge, a quien guarda los secretos de los pagos por US$50 mil dólares sin que tenga experiencia y con fondos de oscuro origen.
Vilcatoma responsabiliza por su integridad a los firmantes de su resolución de despido, entre ellos al presidente Ollanta Humala, pues su resguardo le ha sido retirado.
En declaraciones a RPP recordó que ella fue fiscal provincial de Chimbote a cargo del caso La Centralita, interrogó al asesinado exconsejero de Áncash Ezequiel Nolasco y que por ello en Chimbote dormía en casas distintas todas las noches y tenía protección policial.
Aseguró sentirse “defraudada” del presidente Humala. “El presidente de la República se debe a los ciudadanos peruanos, no se debe a su ministro”, dijo, “me pregunto reiteradamente qué es lo que está sucediendo. ¿Es temor?, ¿es chantaje? ¿Qué está pasando para que no tengan el cuidado debido y tomar este tipo de decisiones?”, preguntó.
Vilcatoma señaló que su despido y la aceptación de la renuncia del procurador Christian Salas, un mes después de presentada, evidencian que aún hay vínculos del prófugo con Palacio. “Personalmente, tengo demasiados datos. Este para mí es un dato”, dijo con su resolución de despido en mano.
Acerca de la grabación a Figallo, por la cual se la acusa, dijo que la Ley de Protección al Denunciante la avala. “Establece que todo funcionario o servidor público que conoce de actos o hechos irregulares, puede grabar la conversación, incluso de un superior jerárquico y puede hacerlo público”, sostuvo.
