El Perú está muy lejos de convertirse en un narcoestado, aseguró hoy el jefe de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), Alberto Otárola, al destacar los esfuerzos que realiza el Gobierno en la lucha contra la producción de drogas y el narcotráfico.
Indicó que los comentarios hechos, en ese sentido, a través de medios periodísticos locales, “están absolutamente descontextualizados”.
“Se ha utilizado una base de datos no oficial que da lugar a especulaciones de ese tipo”, manifestó el funcionario, en declaraciones a la Agencia Andina.
Otárola recordó que incluso la Organización de las Naciones Unidas (OEA) ha reconocido a Perú como “el país que más esfuerzos ha realizado en la lucha contra el narcotráfico”.
“Concretamente, es el que más ha reducido el espacio cocalero y el que más presupuesto ha asignado a la lucha antinarcóticos”, subrayó.
Este mismo organismo internacional ha establecido que el modelo de desarrollo alternativo que Perú lleva a cabo es “bastante adecuado para combatir el narcotráfico”.
Para el titular de Devida, esto se debe a que incorpora hectáreas de terreno agrícola que anteriormente eran ocupadas por el narcotráfico y que ahora están siendo usadas para otro tipo de cultivos.
En cuanto a las cifras oficiales, Otárola apuntó que en 2014 Perú erradicó 31,206 hectáreas de cultivos ilegales, evitando con ello la producción de 252 toneladas de cocaína.
Refirió, en tal sentido, su extrañeza por un informe periodístico en el que se indica que se produjeron 500 toneladas de este estupefaciente.
“Eso no es cierto, y me gustaría saber cuál es la fuente que sostiene eso”, remarcó Otárola Peñaranda.
Cuestionó, asimismo, que se afirme que hay entre 59,000 y 60,000 hectáreas de cultivo de hoja de coca, puesto que -según las Naciones Unidas- estas suman 49,800.
“Todo esto conduce a indicarnos que, si bien no estamos en un paraíso, tampoco estamos ni mucho menos cerca de ser un narcoestado”, puntualizó el jefe de Devida.
Con información de Andina, 02.05.2015