La Bancada de Gana Perú dejó sus ocupaciones parlamentarias para dedicarse a defender a la presidenta del Partido Nacionalista Peruano, Nadine Heredia, tras la publicación de sus agendas, revelan movimientos millonarios entre los años 2009 y 2011.

bancada Gana Peru

 

“Rechazamos esta campaña de demolición que pretende dilapidar nuestro más preciado capital político, el cual es la honestidad. Tenemos las manos absolutamente transparentes, somos y seguimos siendo el grupo que practica la honestidad para hacer la diferencia”, subrayó el vocero.

Respondió a la bancada de Fuerza Popular, que previamente había dado una conferencia de prensa en torno al tema, a quienes les dijo que no tienen la salud moral para comentar sobre las supuestas agendas.

Carrillo, también señaló que el excongresista Álvaro Gutiérrez, quien formó parte de la bancada UPP-Nacionalista, en el gobierno anterior, “no tiene la moral completa” para hacer la denuncia respectiva, luego que señalara que tuvo esos documentos en su poder durante nueve meses.

El vocero nacionalista reiteró que Heredia rechazó esos documentos que considera “apócrifos” y además hubo hurto de sus pertenencias que comprende un USB con fotografías, vouchers y boletas de viaje, que estaban en su domicilio.

“Sobre eso se ha elaborado esta supuesta información que ha sido entregada además para colmo de males a un medio periodístico, cuando una prueba de esa naturaleza tendría que haber ido en primer lugar a la Fiscalía”, dijo.

En tanto el congresista Víctor Isla afirmó que uno de los interesados en dar a conocer el tema de las “agendas” meses atrás era el excongresista aprista, Jorge del Castillo.

Según indicó, Heredia  plantearía una denuncia por este caso, y en el marco de un proceso judicial se realizaría el peritaje adecuado a las agendas, con lo que luego quedaría desvirtuada la denuncia.

“No olvidemos que estamos en una etapa electoral y lo que quieren es demoler al Partido Nacionalista”, puntualizó.

En ningún momento propusieron una investigación exhaustiva y mayores peritajes, sólo se dedicaron a atacar a quienes divulgaron las agendas y a los que se pronunciaron sobre las mismas.