Armamentismo y espionaje son parte de gran objetivo colonizador de Chile
El ex Presidente del Consejo de Ministros Carlos Ferrero alertó que Chile pretende colonizar económicamente al Perú y parte de la estrategia para lograr dicho objetivo es el armamentismo, así como el espionaje recientemente descubierto, por lo que pidió denunciar el TLC con Chile y dejar de venderle más empresas al vecino país.
—¿Qué opinión tiene sobre el espionaje chileno en el Perú?
—La investigación debe revelar quién les facilitó al suboficial Ariza el acceso a documentos clasificados que han sido extraídos de algún lugar. Tenemos a una persona que tenía la responsabilidad de que fueran secretos y con su descuido permitió que se filtrara la información.
—¿A quién se refiere?
—Me refiero a sus superiores o a personas que trabajaban en su entorno pero que eran negligentes, mas ésa no es la cuestión de fondo.
—¿Cuál es la cuestión de fondo?
—La política chilena de agresión económica al Perú para conseguir una presencia predominante que, en la práctica, le va a permitir someter a nuestro país a sus intereses mediante un proceso de colonización.
—¿El espionaje chileno es parte de la estrategia?
—Encuadra muy bien dentro del esquema general porque como ellos dicen: “yo me armo para proteger mis inversiones”, pero necesitan saber qué armamentos tenemos, porque así pueden programar mejor lo que ellos llaman “medidas disuasivas”, que es prepararse para que no les toquen sus inversiones. A ello hay que sumarle que ocupan territorio y mar peruano, que tienen una carrera armamentista y lograron un TLC con amplias ventajas.
—Nosotros le tememos al armamentismo chileno pero ¿qué temen ellos del Perú?
—Chile no quiere que el Perú crezca de manera autónoma sino en función de sus intereses. Sí está de acuerdo con el crecimiento pero para que crezcan sus empresas; las utilidades que obtienen se van a Chile. El interés de ellos es conseguir que el Perú sea su principal plaza económica. Ya pasaron los siete mil millones de dólares (de inversión); no obstante un ministro irresponsable dice que la inversión peruana va a llegar a los mil quinientos millones de dólares en Chile.
—¿De quién habla?
—Del ministro de Relaciones Exteriores quien dice eso, pero la inversión peruana en Chile no pasa de mil millones de dólares. El ministro empezó estableciendo la tesis de las cuerdas separadas que tanto le costó al Perú y que señala que los temas de discusión estratégica con Chile están separados del tema comercial.
—¿El gobierno no quiere ver lo que está pasando?
—La tesis de las cuerdas separadas no existe en ninguna parte del mundo. En todos los países hay una relación entre la política y la economía porque en la economía hay intereses de carácter estratégico que tienen que protegerse políticamente. No se puede permitir que el comercio siga avanzando mientras te están quitando tierras y se están armando.
—¿Cuál es la solución?
—Se debe eliminar de la Constitución la parte que dice que la inversión extranjera se trata igual que la nacional; se debe aprobar el proyecto de ley que señala que sólo se debe dar lo que ellos nos dan a nosotros y aplicar la fórmula que permite la última cláusula del TLC con Chile, que dice que cualquiera de las dos partes se puede retirar siempre y cuando avise con seis meses de anticipación.
—¿Eso es lo que debería hacer el Presidente?
—Mañana (hoy) regresa (el presidente) García y debe decir: “hemos visto que hay muchos problemas con el tema del TLC con Chile, necesitamos analizarlo mejor y conforme a lo establecido a la última cláusula del tratado, el Perú se retira”.
–¿Cree que lo hará?
—García dijo en algún momento que había que tener cuidado con Chile porque se podría enojar. ¿Cómo un Presidente puede decir eso? A mí me da vergüenza como peruano escuchar una declaración así.
—¿Está de acuerdo o no con la cancelación del viaje de la ministra Aráoz?
Está bien, pero esos son gestos. Lo que se debería hacer es promocionar entre los propios peruanos que no sigan vendiendo sus empresas a los chilenos. Es una política ciega porque no percibe las consecuencias.
—¿Cuáles son las consecuencias?
—El Perú pierde autonomía política. Deja de ser una nación independiente y se convierte en un protectorado o en una colonia chilena, es decir pronto se deberá tener pasaporte y DNI chileno si las cosas continúan así.
Cuerdas separadas
—¿El gobierno es muy permisivo?
—Esa política de las cuerdas separadas se ha visto en el caso checo. Resulta que Checoslovaquia quiso vender aviones a Bolivia, entonces fueron los checoslovacos a pedirle permiso a EE. UU. porque eran aviones americanos pero se lo negaron, sin embargo sí le dieron permiso a Holanda para que le venda aviones a Chile.
—¿Hay una preferencia de EE. UU. a favor de Chile? EE. UU. no trata a todos igual, sino según su conveniencia y sus ideologías.
—¡Cuidado!
–¿Qué opina del armamentismo chileno?
—No hay justificación para que compre lo que se está comprando. Ellos dicen que se arman para defender sus inversiones porque yo no creo que Chile esté preparando una invasión, pero cuando el Perú reaccione y se dé cuenta de la penetración de Chile y empiece a adoptar algunas medidas para recuperar lo que ha perdido en manos de Chile, es allí cuando los chilenos se pondrán bravucones y van a decir: “cuidado, no toques nada mío, dame las mismas facilidades de siempre, no me controles porque sino ya sabes lo que te puede pasar”.
—Ante ello, ¿debemos tener unas Fuerzas Armadas disuasivas?
—Disuasivas pero no igual que las de Chile, pero al menos que sepan que si cometen alguna imprudencia les va a costar caro.
Protesta ante EE. UU.
—¿Qué opinión le merece que EE. UU. piense vender armamento a Chile?
—El Perú debe protestar ante EE. UU. porque es el principal proveedor de armas a Chile. En este caso ¿por qué Alan García mira de costado y no de frente? Hay que mirar hacia EE. UU. porque acabamos de firmar un TLC que ha costado muchísimo y ahora resulta que nuestro socio nos da una puñalada por la espalda.
—¿Qué se debería hacer?
—Evaluar nuestra relación con EE. UU. No es posible que se hagan socios nuestros y luego le vendan a quien nos quiere matar, no tiene lógica.
Expreso, 15.11.09
—La investigación debe revelar quién les facilitó al suboficial Ariza el acceso a documentos clasificados que han sido extraídos de algún lugar. Tenemos a una persona que tenía la responsabilidad de que fueran secretos y con su descuido permitió que se filtrara la información.
—¿A quién se refiere?
—Me refiero a sus superiores o a personas que trabajaban en su entorno pero que eran negligentes, mas ésa no es la cuestión de fondo.
—¿Cuál es la cuestión de fondo?
—La política chilena de agresión económica al Perú para conseguir una presencia predominante que, en la práctica, le va a permitir someter a nuestro país a sus intereses mediante un proceso de colonización.
—¿El espionaje chileno es parte de la estrategia?
—Encuadra muy bien dentro del esquema general porque como ellos dicen: “yo me armo para proteger mis inversiones”, pero necesitan saber qué armamentos tenemos, porque así pueden programar mejor lo que ellos llaman “medidas disuasivas”, que es prepararse para que no les toquen sus inversiones. A ello hay que sumarle que ocupan territorio y mar peruano, que tienen una carrera armamentista y lograron un TLC con amplias ventajas.
—Nosotros le tememos al armamentismo chileno pero ¿qué temen ellos del Perú?
—Chile no quiere que el Perú crezca de manera autónoma sino en función de sus intereses. Sí está de acuerdo con el crecimiento pero para que crezcan sus empresas; las utilidades que obtienen se van a Chile. El interés de ellos es conseguir que el Perú sea su principal plaza económica. Ya pasaron los siete mil millones de dólares (de inversión); no obstante un ministro irresponsable dice que la inversión peruana va a llegar a los mil quinientos millones de dólares en Chile.
—¿De quién habla?
—Del ministro de Relaciones Exteriores quien dice eso, pero la inversión peruana en Chile no pasa de mil millones de dólares. El ministro empezó estableciendo la tesis de las cuerdas separadas que tanto le costó al Perú y que señala que los temas de discusión estratégica con Chile están separados del tema comercial.
—¿El gobierno no quiere ver lo que está pasando?
—La tesis de las cuerdas separadas no existe en ninguna parte del mundo. En todos los países hay una relación entre la política y la economía porque en la economía hay intereses de carácter estratégico que tienen que protegerse políticamente. No se puede permitir que el comercio siga avanzando mientras te están quitando tierras y se están armando.
—¿Cuál es la solución?
—Se debe eliminar de la Constitución la parte que dice que la inversión extranjera se trata igual que la nacional; se debe aprobar el proyecto de ley que señala que sólo se debe dar lo que ellos nos dan a nosotros y aplicar la fórmula que permite la última cláusula del TLC con Chile, que dice que cualquiera de las dos partes se puede retirar siempre y cuando avise con seis meses de anticipación.
—¿Eso es lo que debería hacer el Presidente?
—Mañana (hoy) regresa (el presidente) García y debe decir: “hemos visto que hay muchos problemas con el tema del TLC con Chile, necesitamos analizarlo mejor y conforme a lo establecido a la última cláusula del tratado, el Perú se retira”.
–¿Cree que lo hará?
—García dijo en algún momento que había que tener cuidado con Chile porque se podría enojar. ¿Cómo un Presidente puede decir eso? A mí me da vergüenza como peruano escuchar una declaración así.
—¿Está de acuerdo o no con la cancelación del viaje de la ministra Aráoz?
Está bien, pero esos son gestos. Lo que se debería hacer es promocionar entre los propios peruanos que no sigan vendiendo sus empresas a los chilenos. Es una política ciega porque no percibe las consecuencias.
—¿Cuáles son las consecuencias?
—El Perú pierde autonomía política. Deja de ser una nación independiente y se convierte en un protectorado o en una colonia chilena, es decir pronto se deberá tener pasaporte y DNI chileno si las cosas continúan así.
Cuerdas separadas
—¿El gobierno es muy permisivo?
—Esa política de las cuerdas separadas se ha visto en el caso checo. Resulta que Checoslovaquia quiso vender aviones a Bolivia, entonces fueron los checoslovacos a pedirle permiso a EE. UU. porque eran aviones americanos pero se lo negaron, sin embargo sí le dieron permiso a Holanda para que le venda aviones a Chile.
—¿Hay una preferencia de EE. UU. a favor de Chile? EE. UU. no trata a todos igual, sino según su conveniencia y sus ideologías.
—¡Cuidado!
–¿Qué opina del armamentismo chileno?
—No hay justificación para que compre lo que se está comprando. Ellos dicen que se arman para defender sus inversiones porque yo no creo que Chile esté preparando una invasión, pero cuando el Perú reaccione y se dé cuenta de la penetración de Chile y empiece a adoptar algunas medidas para recuperar lo que ha perdido en manos de Chile, es allí cuando los chilenos se pondrán bravucones y van a decir: “cuidado, no toques nada mío, dame las mismas facilidades de siempre, no me controles porque sino ya sabes lo que te puede pasar”.
—Ante ello, ¿debemos tener unas Fuerzas Armadas disuasivas?
—Disuasivas pero no igual que las de Chile, pero al menos que sepan que si cometen alguna imprudencia les va a costar caro.
Protesta ante EE. UU.
—¿Qué opinión le merece que EE. UU. piense vender armamento a Chile?
—El Perú debe protestar ante EE. UU. porque es el principal proveedor de armas a Chile. En este caso ¿por qué Alan García mira de costado y no de frente? Hay que mirar hacia EE. UU. porque acabamos de firmar un TLC que ha costado muchísimo y ahora resulta que nuestro socio nos da una puñalada por la espalda.
—¿Qué se debería hacer?
—Evaluar nuestra relación con EE. UU. No es posible que se hagan socios nuestros y luego le vendan a quien nos quiere matar, no tiene lógica.
Expreso, 15.11.09