El modelo, que fue declarado indeseable por la justicia peruana hace un año, ahora reside en Ecuador, también presentó un contrato de trabajo en el Perú, pero éste fue rechazado por haber sido firmado por Hussid cuando residía en forma irregular en el Perú.
Hussid asegura que desea regresar al Perú y que su contrato estipula la filmación de una producción fílmica sobre su vida, por lo cual le pagarán 500 dólares mensuales.
Según las autoridades de migraciones, a Hussid sólo le quedaría esperar cinco años de prescripción o casarse con una ciudadana peruana en el lugar donde se encuentre, para después pedir un permiso de residencia.
Hussid cumplió una condena de pena privativa de libertad por tráfico de drogas. No tuvo tanta suerte como su compatrtiota, la israelí Lee Hefetz, a quien en el 2005 redujeron la condena de seis años y ocho meses por una de tres años, por el mismo delito.