El Perú crece de la mano de una economía verde, cuidando, valorando y conservando sus ecosistemas.
Biocomercio en el Perú aumentó en más de 150% en el último año.
“A inicios de este año celebramos haber exportado 35 mil millones de dólares. Claramente el sector minero explica más del 60% de este crecimiento, pero debemos destacar que más del 26% de este valor de exportación está sustentado en diferentes bienes y servicios asociados a la diversidad biológica. Agricultura en sus productos tradicionales y no tradicionales, pesca en sus productos tradicionales y no tradicionales y turismo”, manifestó la Viceministra de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales del Ministerio del Ambiente, Rosario Gómez; quien destacó además que “todos estos sectores crecen sobre la base del aprovechamiento de los diferentes bienes y servicios que nos proveen los ecosistemas”.
Estas declaraciones las brindó durante el marco de la conferencia “La
economía de los Ecosistemas y la Biodiversidad” TEEB y “Economía Verde”,
organizada por el Ministerio del Ambiente (MINAM), en coordinación con
el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la
Sociedad Peruana de Derecho Ambiental (SPDA), donde participó también
el líder Mundial de la Economía Verde, Sr. Pavan Sukhdev, quien dio a
conocer avances y recomendaciones desprendidas de ambas iniciativas a
nivel mundial.
“La economía verde es una iniciativa que busca mejorar el bienestar
humano y la equidad social mientras reduce significativamente los
riesgos ambientales y la escasez ecológica. En una economía verde el
aumento de los ingresos y la creación de empleos deben derivarse de
inversiones públicas y privadas para promover la reducción de las
emisiones de carbono y la contaminación, la mejora en la eficiencia
energética y el uso de los recursos así como la pérdida de biodiversidad
y servicios ecosistémicos” sostuvo Pavan Sukhdev.
La viceministra Rosario Gómez, señaló además que a lo largo de este
tiempo de éxito exportador del Perú, nos estamos sirviendo y
beneficiando de los ecosistemas, por lo que es importante traerlos al
frente y revelar la importancia económica que tienen estos bienes y
servicios generados. “Cuando hablamos de exportación, nos referimos a
productos tradicionales y no tradicionales; pero es importante destacar
el crecimiento que hay en los productos no tradicionales. En
agricultura, antes se hablaba de la agroexportación tradicional que
explicaba el 70% del valor de las exportaciones agropecuarias. Hoy día
más del 60% están explicadas por la no tradicionales” puntualizó.
Durante la conferencia se destacó también los emprendimientos de
comunidades organizadas que se han logrado articular a los mercados
nacionales e internacionales utilizando servicios de los ecosistemas y
desarrollando actividades económicas como es el caso de las comunidades
que viven del bosque seco, donde han identificado un mercado que
privilegia el cuidado del algarrobo, lo que les ha permitido el
incremento de las exportaciones de este producto.
Con respecto al Biocomercio, se dio a conocer que los ingresos
provenientes de este sector significaron alrededor de 323 millones en el
año 2010, lo que refleja que hemos crecido en 150% en relación al año
2009, gracias a una veintena de productos distintos como la castaña, el
paiche, la tara, el molle, algarrobo, cochinilla, quinua, entre otros.
Se destacó también que como parte de esta economía verde que vive el
Perú, la conservación de bosques es una señal de cómo el país invierte
en un ecosistema fundamental, porque nos permite conservar la función de
sumidero de carbono, su biodiversidad, hábitat de poblaciones locales e
indígenas, además del ecoturismo que genera más de 150 millones de
dólares por año con todos los efectos multiplicadores de producción y
empleo que ello implica.
Con respecto a la Política Nacional, el país tiene un compromiso de
cuidar, conservar y valorar sus ecosistemas que son la base de
crecimiento y desarrollo sostenible, expuesto en la Política Nacional
del Ambiente. A ello también damos respuestas concretas de cómo el país
invierte en el cuidado de sus ecosistemas sobre la base de las áreas
naturales protegidas, asignándose presupuestos crecientes año a año.
Entre 2009 y 2011 el presupuesto asignado a las áreas naturales
protegidas del país creció en 500%.