El reclamo justo: sobre un pronunciamiento de la CONFIEP

El reclamo justo: sobre un pronunciamiento de la CONFIEP

Alamiro Gutti Martin

El domingo 19 de Junio del presente, un gremio de los más representativos del país a emitido un comunicado o mejor dicho un pronunciamiento, este tiene como título: Declaración por un País con Crecimiento e inclusión Social, este titular es sugerente y emula a los que podría hacer la CGTP, los frentes regionales o mis amigos los caviares que en este momento deben estar muy activos para participar desesperadamente en los nuevos vientos que soplan en nuestro país.
Pareciera que el ánimo de inclusión se extendió de los reclamantes excluidos a los dueños del circo que solo venden entradas a sus amigotes y demás socios relacionados, los ánimos se han extendido y se han contagiado con eso de la inclusión, la lucha contra la corrupción, los derechos humanos y otras palabras muy ajenas al centralismo  limeño bastión de muchas injusticias y de un gremio, porque al final se llama gremio y ahora sus integrantes quisieran llamarle con alma sindicato o algo parecido, la música ha cambiado los diarios encabezados por El Comercio bajaron su tono y de agresivos se volvieron, podríamos decir, amigables o en todo caso neutrales con el ganador en estas últimas elecciones.

Estamos hablando de la CONFIEP, que creó el pánico la bolsa de valores y antes en pleno proceso electoral se despachaba con sus voceros contra Ollanta y orquestaban campañas en la que a sus trabajadores les decían que si ganaba Ollanta se iban las inversiones y no iba a haber trabajo, la de los pronunciamientos sesgados, la que le pago la multa a sus trabajadores para que no vayan a votar por él, porque sabían que no lo iban a hacer por Keiko su favorita, esa CONFIEP es la que ahora habla de derechos humanos e inclusión y toma distancia de Cipriani para el que los derechos humanos son “una cojudez” y de ser el representante de Dios en la tierra, está dispuesto a  aliarse con el diablo con tal que sus intereses más que sus ideas primen sobre su feligresía y sus votos por el dios que parece no creer.

Ahora la CONFIEP, esa misma cuyos presidentes apoyaron el golpe de estado de Fujimori y sus integrantes asintieron de buena manera porque sus intereses estaban en juego, esa misma heredera de los que tocaron los cuarteles cuando peligraban sus ganancias, esa misma que no se dio cuenta o miro con ojo bizco que en el Perú había corrupción y  asesinato y no hablo de derechos humanos e hizo de la sala del SIN su mejor forma de resolver sus problemas, esa la que mientras el pueblo se moría de hambre hacia grandes negocios con la dictadura y ahora con gran armonía lo sigue haciendo con García, la que nos ponía en las noches pre electorales un comercial para que el “Perú no se detenga” y sigan las inversiones aludiendo subliminalmente a Ollanta como el cuco que podría espantarlas, si esa, es la que ahora se lanza con  un buen comunicado con los valores por los que el pueblo se fajo en los últimos 31 años en cuyo tiempo hemos tenido muchos muertos que son solo cifras y no tienen rostro y es mejor olvidar para no sonrojarse de tremendas omisiones. Naturalmente en lenguaje lego “bisnes” son “bisnes” y para eso como antes con Fujimori hay que ponerse las rodilleras para después venderle al cliente, en este caso al nuevo gobierno, aunque sea sebo de culebra, quizás ahora nos salgan hasta participativos y populistas, pero en fin, los negocios o mejor dicho la utilidad es la norma y el norte de todos sus movimientos aunque en esto se les vaya el “honor” que creo  muy poco queda en esos lares y menos en los llamados varones de todo y que se acostumbraron a manejar el país a su antojo como su chacra o redil, con leyes a su medida, licitaciones arregladas o compradas, para decir las cosas con mejor propiedad, con concesiones mineras o avisajes a fin de poder sobrevivir a la ineptitud de solo hacerle propaganda al poder y no saber informar al cliente del que dicen, tiene siempre la razón; pobres clientes, resignados a recibir enlatados de la propaganda gobiernista para que no se den cuenta que estos buenos  campeones de la “libertad de expresión”  encabezados por el comercio,  reciben cada mes un cheque por avisaje que los salva de la quiebra y les llena el estomago y les da el disfrute de comprar lo que “los perros del hortelano”, los “ciudadanos de segunda categoría”, los peruanos que por vivir en las alturas no pueden oxigenar su cerebro y por eso “no piensan bien”, según kuczynski; no pueden hacerlo, porque la INCLUSION  y los DERECHOS HUMANOS no les llegaron  y la corrupción les robo el futuro a ellos, a los hijos de sus hijos y nunca podían reclamar nada. Que la carretera que paso por su pueblo se sobrevaluo en el 20 % para que gane el alcalde o presidente regional, no importa, en fin para ellos también la plata les llega sola.

Pero dentro de todo este pronunciamiento llegado del cielo, porque eso parece y no otra cosa, también le meten su contrabando y en eso están la mano de las poderosas mineras, allí piden: respetar irrestrictamente la constitución, su régimen económico y su sistema político, como no van a pedir esto si allí está el gato encerrado, el kit de la cuestión o no sé qué; allí está el artículo 62 que protege los contratos de estabilidad jurídica y tributaria, donde nadie en el Perú puede saber lo que dice el contrato, ni siquiera el congreso, ¿que lindo no?, que lindo para los que se llevaron 26 mil millones de dolares y no pagaron canon y el impuesto a la renta que correspondía al estado y de 30 % lo redujeron al 3 o 4 % so pretexto de reinversiones nunca hechas, esa es la confíep o mejor dicho esa era, hasta que gano Ollanta y ahora están más mansos hasta que su amo norteamericano les ordene lo contrario.

Definitivamente todo lo que proponen como un avance solo es una mascarada para defender lo que más les interesa y es el capítulo económico de la constitución, así que alertas porque a la hora de los loros, este cuasi llamado sindicato esta adecuándose para los nuevos retos de enfrentarse junto a los rezagos del fujimorismo, del aprismo Alanista, de los restos que quedan de los Pkausas, el mismo PPC y algunos despistados seguidores de Castañeda a lo que será un lucha por cambiar nuestro país.

Por ello, nos toca ahora empezar a organizar a la población, a los que estuvieron al margen de la política en estos últimos siglos y ahora salen a las calles y carreteras para defender lo último que les queda y es su hábitat. A organizar y formar a los que ahora en las calles y carreteras les dan la despedida al ASESINO ALAN GARCIA PEREZ.

Organizarse para hacer la transformación postergada y vapuleada que el pueblo pidió durante siglos, organizarse para conquistar el porvenir que fue negado a nuestros ancestros y nosotros mismos y en esto el “sindicato” de los empresarios poco o nada tiene que aportar, quizás los empresarios patrióticos pero no los vende patria como los que impulsan al gobierno entreguista de Alan García a disparar contra la población en Juliaca-Puno y también en Huancavelica.