Gobierno aprista: situación del país

Por Alfredo Palacios Dongo

El presidente Alan García dejará el gobierno el próximo día 28, y en sus últimos días ha manifestado que “el Perú es la estrella de América” y por el elevado crecimiento podemos estar satisfechos del desempeño económico y social e inclusivo.


Sin embargo, debemos recordarle al presidente que su gobierno únicamente ha seguido un modelo económico ya estabilizado y que las altas tasas de crecimiento se debieron no a una eficiente producción, sino a un patrón basado en las exportaciones de nuestros nuestras materias primas sin valor agregado y con un escenario favorable de altos precios de nuestros minerales (cobre, oro, plata y zinc) que son limitados y no renovables.

Asimismo, recordarle que dicho crecimiento no ha incorporado un eficiente modelo de desarrollo que compatibilice la distribución de la riqueza en las regiones y que por ello existen aún elevados niveles de pobreza, inequidad y desigualdad. Justamente, en las zonas más pobres, donde paradójicamente prevalece la actividad minera, gasífera y petrolera, casi se han triplicado los conflictos sociales y manifestaciones de violencia (de 82 a 227), ocasionando casi un centenar de muertes. El gobierno deja también una terrible informalidad, entre las cinco más altas del mundo —60% del PBI y 80% de la PEA es informal— y un crudo panorama laboral, sin trabajo digno para casi el 70% de ciudadanos con bajísimos sueldos y sin protección social, así como más de un millón de jóvenes desempleados y dos millones de niños trabajadores.

También recordarle que la Estrategia Antidrogas 2007-2011 fracasó rotundamente no habiendo cumplido ninguna de las siete metas proyectadas. Nuestra Amazonía está siendo deforestada por la tala ilegal, la minería informal y el narcotráfico. No se ha logrado el desarrollo institucional del sector público. Los casos de corrupción de funcionarios públicos se incrementaron exponencialmente en delitos por peculado, contra la fe pública y negociaciones incompatibles. Y el sistema educativo presenta desigualdad educacional y baja calidad, nuestros estudiantes ocuparon los últimos puestos en comprensión de lectura, matemáticas y ciencias en la última prueba PISA 2010.

Recordarle además al Presidente que el terrorismo continúa en avanzada —ocupamos el puesto 35 a nivel mundial en mayor riesgo de ataques terroristas—, solo entre el 2010 y los meses en curso realizaron 26 ataques —el último hace 4 días— falleciendo 25 efectivos y quedando más de 50 heridos. Y en seguridad ciudadana somos el país de la región con mayor victimización. Por último, este gobierno, además de intentar afectar arbitrariamente los congelados sueldos y pensiones del personal militar-policial, tiene la gran responsabilidad constitucional de dejar a nuestras FF. AA. con graves problemas de operatividad y al país en situación de indefensión. Expreso, 23.07.2011