Herbert Mujica Rojas
La “inauguritis”, enfermedad que ataca, sobre todo, a los presidentes que ya se van, y la administración Humala, no es excepción alguna, pretende imponer un genuino caballazo de US$ 250 millones de inversión propia del Estado peruano, con postor único.
No sólo eso, un gigantesco subsidio pues el servicio que movilizará a la población hacia los paraderos no podrá pagar más de S/ 1.50 y el resto estará a cargo del Estado.
Inversión propia del Estado + subsidios pueden dar una cifra, a todas luces, abrumadora y virtualmente enchufada con alevosía al nuevo gobierno de Pedro Pablo Kuczynski.
Se trata del teleférico de San Juan de Lurigancho y la idea es poner la primera piedra antes del 28 de julio.
El concedente es el Ministerio de Vivienda y su representante (ver tarjeta adjunta), Wilhelm Funcke Figueroa, Director Ejecutivo Nuestras Ciudades; y el licitante es: UNOPS (Oficina de Proyectos de Naciones Unidas), y sus delegados (ver tarjetas adjuntas) son: Fernando Cotrim Barbieri, Especialista Legal y Silvia Chouciño Oficial de Programa, Perú.
Según UNOPS, se pretende que las propuestas sean mostradas en 14 días, aunque el mínimo razonable y decente (para evitar malos entendidos o contratos con dedicatoria), es de 90 días.
Son tres las empresas especializadas en teleféricos en el mundo: Doppelmayr, austriaca/Garaventa suiza; Bartholet (BMF), suiza; Poma italiana/Leitner francesa.
En Kuelap, se construye un teleférico y nada menos que Poma en consorcio con IGGSA, está encargada de la obra y no estará lista este junio sino en noviembre.
Pero resulta que Poma logró inscribirse como contratista ejecutor de obra, además de consultor y proveedor.
La OSCE (Oficina Supervisora de Compras del Estado), decidió que todos los postores debían seguir estas reglas. En realidad, una manera ingeniosa y legalista de sacar a los otros dos competidores.
Para poder inaugurar el teleférico de Choquequirao se impuso la exigencia de 19 meses de duración para tenerlo listo antes del 28 de julio pero es imposible hacerlo antes de 24 meses.
La primera licitación para los teleféricos de El Agustino y San Juan de Lurigancho fue declarada desierta por UNOPS.
La segunda licitación, solo para San Juan de Lurigancho se registra el 17 de junio y las ofertas tienen que estar presentadas el 4 de julio, apenas 18 días contra un plazo normal de elaboración de la oferta de 90.
Preguntas simples
1 ¿Por qué plazos de 30 días cuando lo usual en el mundo entero es que las empresas armen sus propuestas en 90?, ¿hay nombre propio y dedicatoria en la licitación?, o sea ¿que el Estado pague cualquier precio con tal de poner la primera piedra a cargo del presidente que se va?
2) ¿No es mejor y razonable que el Estado peruano reciba tres propuestas y evite el espectáculo sospechoso de entregar obras a postores únicos?
3) ¿Acaso no asume en pocos días más el gobierno y la administración del Perú, Pedro Pablo Kuczynski ganador de la presidencia de la República?
4) ¿Qué hacen las entidades internacionales y que gozan de conveniente inmunidad diplomática metiendo sus narices en temas nacionales? Conozco, muy de cerca, el caso de OACI-ICAO que sin saber, absolutamente nada, de pasaportes electrónicos, “lideró” el proceso en la Superintendencia Nacional de Migraciones, caso que está siendo auditado por la Contraloría General de la República.
24.06.2016