Por Alfredo Palacios Dongo
Hace 9 años al promulgarse la ley 29565 de creación del Ministerio de Cultura fueron adscritas todas las entidades estatales culturales, entre ellas, el Archivo General de Nación (AGN) que pertenecía al Ministerio de Justicia, teniendo la responsabilidad de conservar y organizar nuestro histórico patrimonio documental que constituye la memoria de la nación, sin embargo esta entidad presenta serios problemas en su labor archivística, control documentario y conservación, habiéndose agravado la desatención de repositorios y pérdida documental. Según el ex director general de industrias culturales y artes, Santiago Alfaro “existen proyectos y servicios que no han logrado despegar en estos años, entre ellos, el AGN (cercado por mafias)”.
Nuestro histórico patrimonio documental debe protegerse
El pasado 17 de junio el Ministerio de Cultura publicó la Alerta Virtual N°084-2019 describiendo la pérdida de un histórico e invalorable documento de la Comandancia General de la Marina, donde Miguel Grau firma un manuscrito de fecha 16 enero 1878 con instrucciones para la gobernación de las guaneras del sur, además hay otros manuscritos sustraídos de nuestro máximo héroe, según informe de Ojo Público en enero pasado la dirección del AGN reveló la desaparición de 48 folios rotulados “Miguel Grau, 22 noviembre 1877 al 10 noviembre 1887” quedando solo la hoja de información general y datos técnicos de procesos archivísticos por épocas. Recordemos que en noviembre 2018 se detectó la pérdida de otro importante manuscrito del Libertador José de San Martín de fecha 13 octubre 1821.
Las dos sedes más importantes del AGN son el Ex Correo (archivo Colonial y Republicano) donde sucedieron estás pérdidas, y es vulnerable contra inundaciones e incendios por encontrarse en un pasaje cerca de dos restaurantes y una pollería con chimenea (si ocurriera un incendio sería muy dificultoso combatirlo por falta de agua e inaccesibilidad para bomberos), la otra sede en el sótano del Palacio de Justicia (archivos públicos notariales y judiciales) tiene peligro de desalojo, y por último existe la pretensión del Ministerio de Cultura de trasladar el AGN a Huamanga, Ayacucho, lo cual es cuestionado por historiadores y archiveros.
Bajo este panorama estamos a dos años del Bicentenario y corresponde al Estado acciones integrales para proteger la memoria de la Nación como la construcción de un local del AGN en lugar adecuado y previsto de sistemas y equipos de conservación, digitalización de fondos documentales, archivo, control, custodia y seguridad para esta entidad depositaria de nuestro histórico patrimonio documental indispensable para instituir nación y ciudadanía.
Expreso, 27.07.2019