Carlos Javier Jarquín
Muchos hombres no aprecian la existencia del perfumado primor femenino, provocarle torrenciales lágrimas a una mujer es irrespetar acentuadamente la sagrada y divina creación del universo, es alarmante las circunstancias que viven muchas mujeres. Mujer, nunca calles los abusos de la calle, no debes permitir la violencia cuando tú callas los abusos, estás alimentando el poder del agresor, sea quien sea tu deber es denunciar lo trágico que estás viviendo. Las mujeres son la exquisita fragancia de nuestra respiración, la presencia de ellas, es lo que le da sentido maravilloso a nuestro mundo, el mar de felicidad e inspiración que ellas desbordan no tiene comparación, no hay razones para darles maltrato, sí, motivo para hacerlas vivir lo dulce del mundo terrenal. Lastimar a una mujer físicamente o verbalmente es lo más incoherente que un hombre puede hacer.