Diabólica: Mercedes Aráoz no tiene palabra. Había dicho que no aceptaría presidencia con vacancia
La gente que no tiene palabra no vale nada, se dice. Lo cierto es que no tener palabra es una falta moral muy grave no de carácter personal, sino que causa daño a los demás o a la sociedad y Mercedes Aráoz, que hace noticia por su espurio juramento a la “presidencia” por un congreso disuelto, es una mujer que no tiene palabra.