Los científicos no sospechaban encontrar un arrecife de coral ni tantos tipos de peces en aguas tan fangosas.

Un equipo de científicos ha descubierto un enorme arrecife de coral en la desembocadura del río Amazonas, entre la frontera de Guayana Francesa con Brasil y el Estado brasilero de Marañón, indica la agencia EFE. El grupo de científicos, liderado por Rodrigo Moura, de la Universidad Federal de Río de Janeiro, investigó la zona en tres cruceros oceanográficos con la colaboración de Brasil y Estados Unidos.

rio Manu

El río Manu es un río del sureste del Perú, afluente del río Madre de Dios. Nace en las laderas orientales de la cordillera de los Andes, en la cuenca del Amazonas, y discurre por la Reserva de la biosfera, hogar de una de las mayores concentraciones de diversidad biológica.Enrique Castro-MendivilReuters

Los científicos se quedaron asombrados al encontrar el arrecife bajo el agua fangosa en un sitio ya marcado para la exploración petrolífera, indica 'The Guardian'. No sospechaban la existencia del arrecife a lo largo de casi mil kilómetros y a una profundidad que varía de entre los 30 y los 120 metros, porque muchos de los grandes ríos del mundo generan grandes lagunas en los sistemas de arrecifes en donde no crecen los corales.

Además, existían pocas evidencias de la presencia de corales de este tipo, ya que en su mayor parte proliferan en aguas claras, iluminadas por el sol, mientras que las aguas ecuatoriales cerca de la desembocadura del Amazonas son algunas de las más fangosas en el mundo, con grandes cantidades de sedimento.

Según 'The Guardian', se encontraron más de 60 especies de esponjas o poríferos, 73 especies de peces, langostas, estrellas de mar y mucha más diversidad de vida en el arrecife.

Su hallazgo fue una completa sorpresa, afirma la coautora del descubrimiento Patricia Yager, profesora de oceanografía y cambio climático en la Universidad de Georgia. "Me quedé atónita, como el resto de los 30 oceanógrafos", confesó a 'The Atlantic'.


Russia Today, 23.04.2016