Los cultivos de algodón BT promueven la proliferación de otras plagas y malezas
El algodón Bt fue diseñado para que los cultivos sea resistentes a plagas de lepidópteras (familia de las mariposas y polillas). Luego de una década de experiencia con algodón Bt en Estados Unidos, se ha visto que el uso continuo de algodón Bt, si bien ha disminuido la incidencia de las plagas lepidópteras, ha generado la proliferación de nuevas plagas, causando graves problemas económico a los cultivadores del algodón.
Así lo reportó el entomólogo Gus Lorenz, responsable del programa de gestión integrado de plagas de la Universidad de Arkansas, quien recientemente presentó un trabajo en la Conferencia Beltwide Cotton 2009 sobre el impacto que ha tenido la introducción de algodón Bt en los productores de algodón en Arkansas.
El señaló un incremento en las plantas que pueden servir como hospederas del chinche succionador del algodón del género Lygus, y otras plagas como ácaros, lo que ha favorecido su proliferación. El área sembrada cayó de 1,2 millones de acres a 640.000 acres en el 2008.
Lorenz notó que el costo para controlar a Lygus en 2007 fue de acerca de $8,65 en el promedio a través de la Zona Algodonera, pero los costos en la región del centro sur fueron de entre $25 a $48 por acre.
El señala que, hace veinte años, antes del ingreso del algodón transgénico, las pestes mayores eran lepidópteros. Se trató de solucionar este problema con el algodón Bt, lo que se ha hecho de manera parcial, pero ahora surgen nuevas plagas como es el chinche del algodón, lo que demandará tomar nuevas medidasde control por parte de los algodoneros.
Otro problema es el también están surgiendo como una gran plaga de algodón es Nezara viridula (otra forma de chinche) de acuerdo con Lorenz. La infestación de esta plaga es el resultado del monocultivo de algodón Bt.
La presencia de ácaros, que surgen en los cultivos extensivos de algodón Bt es también problemático. Los entomólogos están tratando de encontrar una correlación entre la infestación de ácaros y la declinación de los rendimientos del algodón, lo que obligará a los algodoneros introducir acaricidas en su paquete agrotóxico.
Los agricultores tienen que enfrentar también el problema de la resistencia a insecticidas. Algunos piretroides, han perdido su eficacia en la mayor parte del centro sur de Estados Unidos, están teniendo también problemas con insecticidas más fuertes. El señala que algunos nuevos químico como el novaluron (Diamond) y el flonicamid (Carbine) no funcionan con los viejos métodos de pulverización por exploración, y luego de tres días ver si aun está la plaga.
La resistencia a malezas se ha convertido en un gran problema en el cultivo de algodón, porque con frecuenc
a el algodón Bt ha sido también manipulado genéticamente para ser resistente a herbicidas. Hay ya zonas algodoneras en Estados Unidos donde las malezas son resistentes al herbicida usado de manera intensiva, por lo que se debe usar unos más fuertes. A esto se suma que hay una crisis económica y una crisis agrícola, y un modelo basado en un alto uso de insumos (herbicidas, insecticidas y acaricidas) ya no les resulta rentable.
La propagación de la resistencia sucedio casi la noche a la mañana en la región algodonera de Estados Unidos en el 2007. Muchas malezas resistentes a inicios del 2006 que estaban en zonas aisladas cubrían casi todos los campos de algodón en el 2007.
Fuente: HUNGRY INSECTS CROWD COTTON‚S TABLE
Delta Farm Press, USA