Clonan tarjetas de crédito en Ripley
A sus prácticas de engaño al consumidor ahora se suma un peligro para los compradores: la policía investiga la clonación de tarjetas de crédito de esta tienda chilena, con la presunta complicidad de trabajadores de ésta.
Los rastros fueron encontrados tras la captura que realizó la Policía Nacional de una banda de clonadores de tarjetas de crédito, quienes tenían en su poder tarjetas de crédito de las tiendas Ripley.
La policía no sospecha de uno sólo de los locales, sino que toda la cadena está siendo investigada, según indicaron en nota de prensa, por lo cual citaron al jefe de seguridad para esclarecer los hechos.
Los capturados son Aquiles Edson Muñoz Díaz (28) (a) “Barnie”, Edgar Arnaldo Bravo Bustamante (31), (a) “Toto”, Paul Walther Dupont Rey(32), (a) “Paul”, y Juan Carlos Obregón Minaya (45), (a) “Moqui”, tras una operación cerca al centro comercial Higuereta, en Surco.
Se entiende por clonación de tarjetas la se produce cuando se obtiene el código de seguridad pasando la banda magnética por el lector, tras lo cual usan ese código para colocarlo en una tarjeta falsificada.
En este caso, la policía preliminarmente pudo constatar que los delincuentes tenían tarjetas robadas y para completar su fechoría falsificaban carnés de extranjería e Bravo Bustamante, de nacionalidad boliviana, con lo cual conseguían adquirir en la tienda en perjuicio de los verdaderos titulares de las tarjetas, pues los cajeros no tienen cómo determinar la autenticidad de los documentos.
La policía no sospecha de uno sólo de los locales, sino que toda la cadena está siendo investigada, según indicaron en nota de prensa, por lo cual citaron al jefe de seguridad para esclarecer los hechos.
Los capturados son Aquiles Edson Muñoz Díaz (28) (a) “Barnie”, Edgar Arnaldo Bravo Bustamante (31), (a) “Toto”, Paul Walther Dupont Rey(32), (a) “Paul”, y Juan Carlos Obregón Minaya (45), (a) “Moqui”, tras una operación cerca al centro comercial Higuereta, en Surco.
Se entiende por clonación de tarjetas la se produce cuando se obtiene el código de seguridad pasando la banda magnética por el lector, tras lo cual usan ese código para colocarlo en una tarjeta falsificada.
En este caso, la policía preliminarmente pudo constatar que los delincuentes tenían tarjetas robadas y para completar su fechoría falsificaban carnés de extranjería e Bravo Bustamante, de nacionalidad boliviana, con lo cual conseguían adquirir en la tienda en perjuicio de los verdaderos titulares de las tarjetas, pues los cajeros no tienen cómo determinar la autenticidad de los documentos.