La Comisión de Competencia surcoreana (KFTC, por sus sigla en inglés) impuso una multa provisional de 207.400 millones de wones (unos $177 millones) a Google por obligar a los fabricantes de teléfonos inteligentes a instalar su sistema operativo, Android.
"Google ha limitado la competencia en el mercado de sistemas operativos para teléfonos móviles y obstaculizado la innovación en otros campos de sistemas operativos para dispositivos inteligentes", cita la agencia Yonhap a la presidenta de la KFTC, Joh Sung-wook.
El dictamen fue emitido al término de una investigación que comenzó en 2016 en relación con las prácticas comerciales seguidas por tres empresas, Google LLC, Google Asia Pacific y Google Korea.
Según el organismo regulador, Google se aseguró una cuota del 72 por ciento en el mercado de sistemas operativos para móviles, tras lo cual impidió a los fabricantes lanzar dispositivos equipados con una bifurcación de Android.
Desde 2011, Google supedita la concesión de licencias sobre las aplicaciones de Play Store, y otras, que proporcionan la última versión del código fuente de Android, a la aceptación de las cláusulas recogidas en el llamado Acuerdo Anti Fragmentación (AAF, en inglés), lo que organismos antimonopolios de varios países califican de abuso de posición dominante en el mercado.
A fines de agosto pasado, Corea del Sur se convirtió en el primer país del mundo que prohibió por ley a empresas como Google y Apple obligar a los desarrolladores que utilicen su sistema de pagos en las respectivas tiendas de aplicaciones, a cambio de comisiones de hasta el 30 por ciento.
Con información de Sputnik