—El 67% de los desastres ocurridos en el Perú tienen que ver con eventos climáticos.
—Las empresas tienen un rol clave en la reducción y compensación de emisiones que contribuyen con el cambio climático.
Huracanes, tifones, lluvias, inundaciones. Las últimas semanas nos hemos visto bombardeados por noticias de los tristes daños que estos eventos de la naturaleza han causado alrededor del mundo. Y no podemos ser ajenos a ello: el Perú es el tercer país más vulnerable al cambio climático en Sudamérica. Aquí, el 67% de los desastres ocurridos tienen que ver con eventos climáticos.
¿Podemos hacer algo al respecto? Sí. Aunque parezca una tarea titánica, todos en la sociedad tenemos un rol determinante y las empresas son actores clave en este escenario.
Pacífico Seguros, empresa carbono neutral que desde hace ocho años protege Reserva Nacional Tambopata y el Parque Nacional Bahuaja Sonene, ofrece tres consejos clave para que las compañías –grandes y pequeñas– asuman su rol contra el cambio climático en la medida de sus posibilidades.
1. Reducir nuestros impactos:
No hace falta ser una gran fábrica para contaminar a través de nuestras operaciones diarias. ¿Sabías que dejar una computadora prendida toda la noche equivale a contaminar el medio ambiente hasta con 16 globos llenos de CO2? Para tener una idea de cuánto impactamos, lo ideal es medir nuestra Huella de Carbono (la página de las Naciones Unidas te permite hacerlo de manera fácil: http://unfccc.int/resource/climateneutralnow/calculator.html). Pero incluso si no lo hacemos, hay muchas acciones que podemos tomar para reducir nuestros impactos:
-Cambios en la infraestructura: uso de luminarias LED, caños ahorradores de agua y apagado automático del aire acondicionado son algunas inversiones que no solo generan ahorros en las cuentas a fin de mes, sino que reducen sustancialmente la contaminación.
-Gestionar tus residuos: Colocar tachos para segregar la basura es importante, pero asegurarte de que esta llegue a buen destino lo es más. Muchas ONG y organizaciones trabajan con recicladores formales y pueden ayudarte en esta tarea.
2. Sensibilizar a nuestros colaboradores:
Ellos son los principales vehículos de cambio. Si quienes trabajan en la empresa son conscientes de que sus acciones impactan el medio ambiente, entonces no solo serán más cuidadosos en su lugar de trabajo, sino también en sus casas. Incentívalos:
-Haz concursos de reciclaje en los que compitan por usar menos y reciclar más.
-Prepara un taller interactivo donde expliques qué es la huella de carbono, y los animes a proponer cómo reducirla desde la empresa.
3. Seguir el camino trazado:
No se trata de descubrir la pólvora, sino de alinearnos a los caminos ya trazados. Por ejemplo: la Agenda 2030 definió 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que son una guía para el trabajo de las Naciones Unidas –y de todos aquellos actores que se comprometan con ellos –. Varios de estos objetivos se refieren al medio ambiente, como (13) Acción por el clima, (14) Vida submarina y (15) Vida de Ecosistemas Terrestres. En la web de las Naciones Unidas se puede leer el detalle de cada objetivo, y sirven de base para crear acciones y estrategias en las compañías que combinen el efecto social y ambiental con el retorno económico.