De acuerdo al informe Tierra de resistentes el mayor número de ataques registrados a defensores del medio ambiente se produjeron en Brasil.
Alrededor de 1.179 defensores y 177 comunidades de siete países de América Latina fueron objeto de diversos ataques entre 2009 y 2018 por la defensa y protección del medioambiente.
Según la organización colombiana Consejo de Redacción presentó su proyecto "Tierra de resistentes" en el que investiga y denuncia los ataques contra defensores del medioambiente de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guatemala, México y Perú.
Según la investigación, de las 1.179 personas atacadas, el 81,69 por ciento fueron hombres y el 18,31 por ciento mujeres, todos víctimas de amenazas, asesinatos, desplazamientos, desapariciones o violencia sexual, entre otros.
También reveló que al menos 177 comunidades de indígenas y afrodescendientes fueron víctimas, entre ellas la Munduruku en Brasil, que solo en cinco años sufrió 35 ataques, y la Nahua en México, que tuvo 30 agresiones.
El país que registró el mayor número de casos fue Brasil, con 754, seguido de México (222), Colombia (180), Guatemala (97), Ecuador (59), Perú (27) y Bolivia (18).
De acuerdo al informe la mayoría de los ataques y agresiones ocurrieron por la defensa de la tierra, que abarca 867 casos, mientras que la defensa de los bosques fue la causante de 242 ataques y la del agua generó 234 más.
La presidenta de Consejo de Redacción, Dora Montero añadió que el factor común de los ataques en los siete países se debe a la presencia de grupos narcotraficantes y el abandono del Estado en las regiones afectadas.
Montero lamentó además la impunidad en la que continúa la mayoría de los casos, de todos los ataques registrados tan solo hay 50 con sentencias y 274 siguen bajo investigación.
"Esperamos que se tomen algunas decisiones, queremos que realmente haya impacto e incidencia. Queremos mostrar lo grave que es la situación (...) La idea es colaborar con el proceso de verdad en la región y que a raíz de eso haya alguna presión", concluyó Montero.