Piratas atuneros serian asesinos de delfines
¿Quién protege el mar y sus recursos?
Todo indica que el Instituto del Mar del Perú, IMARPE, continua sin brújula, perdido en el limbo, palpando a ciegas lo que por incapacidad no pueden establecer; esto a pesar que publicitan a los cuatro vientos, contar con una de las mejores ambientalistas a quien han galardonado como una brillante científica, lo cierto es que esa brillantes de la señora Patricia Majluf, se quedó en Paita embarcada en una lancha merlucera, puesto que su gestión como directiva en esta institución y como Viceministra de Pesquería, deja mucho que desear y pone en riesgo el desarrollo del sector pesquero.
Los más de 3 mil delfines hallados muertos a lo largo del litoral norteño obligan no solamente al Ministerio de la Producción sino también al Ministerio del Ambiente y al Ministerio Público realizar una exhaustiva investigación, por cuanto las dos versiones que se manejan, tanto del IMARPE como de la ONG ORCA, no concluyen en algo certero, pues la primera sustenta que fueron 780 los cetáceos que aparecieron varados a consecuencia de una posible exploración petrolera; mientras que la segunda afirma que la muerte de dichas especies se debió a la “burbuja marina”, que es la que se forma en el Mar debido a la explotación petrolera y de minerales, la cual produce ondas acústicas que los dañan orgánicamente, haciéndoles perder equilibrio, desorientación, sangrado interno, destrucción del oído, de los pulmones, el hígado, los riñones y en algunos casos se les fracturan algunos huesos y hasta les ocasionan derrames cerebrales, lo que se conoce como síndrome de descompresión aguda.
Sin embargo, para PERUPESQUERO la muerte de estos cetáceos tendría mucho que ver la presencia de barcos atuneros extranjeros, entre ellos piratas, que faenan desde Tumbes hasta Chiclayo; precisamente en esta zona donde fueron encontrados varados decenas de delfines barriga blanca y con las trompas marcadas por la malla de la red atunera, también fueron detectadas más de 8 naves pescando a 70 millas mar adentro. Sabemos perfectamente que los cardúmenes de túnidos van acompañados de delfines, todos en busca de alimento, sobre todo el atún aleta amarilla; y cuando el barco hace su cala, encierra todo el cardumen completo (atún y delfines) hasta llegar al extremo de la red donde hace el saco quedando el espacio reducido, por lo que las trompas de los delfines quedan amalladas en el paño, ocasionándoles asfixia y, por ende la muerte, ya que el diámetro de la malla es de 4 ¼ pulgadas.
“Unos 4 delfines aparecieron muertos en una playa de Tumbes. Los animales eran de diferentes tamaños y ya suman más de 160 de esta especie que son varados en las playas del norte del país. Hasta ahora se desconocen las razonas por la que estos animales estarían muriendo”.
Cabe indicar que las mallas atuneras, que miden entre 800 a 900 brazadas de largo, deben de estar acompañadas por un espacio protector de delfines ("dolphin safe" y "speed boats"), cuya malla debe de ser más pequeña y su tramo más de 60 brazadas; además de que el observador impuesto por la CIAT que viaja en los barcos atuneros está obligado a informar no sólo en su diario sino también en las bitácoras y en el diario del capitán, todo lo que sucede en alta mar, especialmente cuando se trata de la captura de delfines y su posterior muerte, pues eso es considerado crimen ecológico. No escapa también la responsabilidad del capitán, cuyos lances (horario) deben estar regulados por la CIAT de esta manera, evitaran de cometer la mortandad de los cetáceos no sólo en aguas peruanas sino también en Mar abierto.
La hipótesis de PERUPESQUERO es ratificada por la Federación de Pescadores Unificadas del Norte del Perú, Lambayeque y Piura, quienes intensificarón su lucha sindical para exigir a las autoridades, poner coto a la presencia de embarcaciones extranjeras piratas de capacidades de 500 a 600 TM. que depredan bonito y atún dentro de nuestras 200 millas y ante el silencio cómplice de la DICAPI, burlan nuestra seguridad marítima.
Es importante que el Ministro de la Producción, José Urquizo, tome en cuenta la mortandad de estos cetáceos y llame a los armadores, los lobistas y a los capitanes de estos barcos y les exija responsabilidad en sus faenas y que cada barco que logre su permiso, para pescar en aguas peruanas, sólo debe llevar uno o dos speed boats (lanchas rápidas) para de esta manera evitar la muerte de los Delfines además que todo el Atún capturado para que sea exportado y tenga más precio en el exterior debe de ser capturado bajo el conocido dolphin safe, lo que se conoce como libre de Delfines. Pero también es prioritario que el Ministerio Público y el Ministerio del Ambiente, busquen regular normas, no sólo pecuniarias sino también punitivas, para sancionar con todo el peso de la Ley a quienes cometan delitos ecológicos.
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