Como sabemos, los chilenos están detrás de los lobbies que promueven el festival de concesiones de nuestros sitios arqueológicos para ser explotados por sus inmorales empresas. Pero por lo menos en el Cusco, la población ya se cansó de tanto entreguismo y unas 10.000 personas marcharon esta semana en rechazo al proyecto de ley para dar en concesión las zonas adyacentes a los sitios arqueológicos con el fin de construir hoteles y restaurantes.
Zegarra agregó que el proyecto de ley se ha hecho con desconocimiento del ordenamiento legal y técnico respecto a la protección de los monumentos arqueológicos.
El Congreso aprobó, el 17de mayo, el proyecto de ley que permitirá dar en concesión, por 30 años, los bienes culturales del país para instalar hoteles y restaurantes que guarden coherencia con los circuitos turísticos. Los recursos por la concesión serán destinados a recuperar los sitios arqueológicos que lo requieran, precisó la norma. Sin embargo, está pendiente la promulgación de este proyecto de ley por el Ejecutivo.
La movilización, que convocó a estudiantes, campesinos y trabajadores del INC, recorrió las principales calles de la antigua capital del Imperio de los Incas desde la céntrica plaza de armas.
Una misión del Fondo de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) visitó hace unas semanas el Cusco para inspeccionar el estado de conservación de la ciudadela de Machu Picchu, declarada patrimonio cultural de la humanidad en 1983. Entre las conclusiones de la visita se expresó la preocupación por el desorden que prima en las construcciones levantadas en los alrededores del centro arqueológico, entre las que figuran restaurantes, hoteles y tiendas comerciales.