Se trabaja con las autoridades públicas para aprovechar las oportunidades que ofrecen los mercados internacionales. Del total de la producción nacional, el 50% se comercializa en el mercado local y el otro 50% en el exterior.
Este 2020 cerrará en rojo, pero la exportación de ajíes y pimientos se recuperaría el próximo año gracias al trabajo que desarrolla el sector privado con el apoyo de las autoridades, manifestó el presidente del Comité de Capsicum de la Asociación de Exportadores (ADEX), Renzo Gómez, durante la clausura del Capsicum Week, realizado en el marco de la Expoalimentaria Virtual 2020.
Detalló que este año los despachos se contraerían -17% a causa de la pandemia, lo cual afecta gravemente esa cadena productiva de una forma como no se había visto en los últimos diez años. “La proyección está ligada a los menores despachos en conserva, secos y congelados debido a las medidas de restricción desatadas por la crisis sanitaria que perjudicó el canal de hoteles, restaurante y cafeterías (Horeca)”, comentó.
Añadió que solo los despachos de capsicum fresco se dispararon por la tendencia saludable en el mundo, aunque los montos no son los más significativos ya que los más altos son los de conserva, secos y congelados.
Lamentablemente Perú no estaba preparado, continuó el vocero, para aprovechar el crecimiento de esa categoría (fresco), pero con un trabajo organizado podemos recuperarnos hacia el 2021. El reto es que su participación dentro del total exportado pase del 1% (en el 2019) al 50%.
“Países como los EE. UU. solo aceptan capsicum frescos cultivados en casa malla (requiere de una gran inversión) por lo que también es importante que el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) logre el reconocimiento de las zonas erradicadas de la mosca de la fruta, por parte de sus pares del país del norteamericano, con lo cual se podrá producir en campo abierto donde Perú demostró tener un éxito rotundo”, expresó
Enfatizó que la ADEX capacita a los integrantes de la cadena y explica los beneficios del uso de las casas mallas. “El gobierno mexicano apoya a sus agricultores con más zonas protegidas con invernaderos de alta tecnología. Lo mismo pasa en Almería, España; en Países Bajos son muy modernos y sus invernaderos tienen aire acondicionado, climatizadores y otros”, comentó.
Gómez señaló la necesidad de dotar de tecnología de punta a los actores del rubro. Mencionó el caso de productores de Oxapampa quienes enfrentan problemas de lluvia, pero que, con el apoyo del Gobierno (financiamiento), podrían producir rocoto en casas malla y exportarlo sin problemas.
Un punto importante, mencionó, es la promoción de la oferta exportable, algo en lo que México, un gran productor y exportador de capsicum, lleva la delantera desde hace años. “Sus instituciones públicas y privadas han hecho una labor extraordinaria con el jalapeño al lograr su reconocimiento internacional. De la mano con PromPerú, nosotros buscamos cristalizar una marca para los capsicum peruanos”, recalcó.
Gómez detalló que del total de la producción de capsicum en el país, el 50% es para consumo interno (rocoto, ají escabeche, pimiento morrón y ají panca), mientras que el 50% restante se exporta (páprika, pimiento morrón y piquillo, entre otros).
Agenda
El Plan de desarrollo sostenible de los capsicum 2018-2028, aprobado por la Resolución Ministerial N° 0434-2017 - Minagri en el 2017, es uno de los trabajos más representativos a favor de esta canasta, y para hacerlo realidad, se debe promover su ejecución y ofrecer productos más estandarizados.