Los Estados más ricos del mundo deben proporcionar de inmediato asistencia a los países necesitados para luchar contra el hambre y la migración, declaró la directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva.
"Para prevenir el hambre, la desnutrición y la migración, los países más ricos deben ayudar urgentemente a los necesitados, incluso a través de financiamiento multilateral, especialmente a través del Programa Mundial de Alimentos", dijo Georgieva a través de su informe 'Ante el deterioro de las perspectivas económicas: cómo puede responder el Grupo de los Veinte (G20)'.
Según la jefa del FMI, lo primero que deben hacer es levantar lo antes posible las sanciones impuestas sobre las exportaciones de alimentos.
Además, señaló, se necesitan acciones decisivas para introducir un enfoque común a nivel de los países que pertenecen al G20 para gestionar la deuda.
"Los grandes acreedores, tanto soberanos como privados, deben aportar su parte. El tema clave es el progreso en una variedad de asuntos, desde la legislación fiscal y el comercio hasta la preparación para nuevas pandemias y el cambio climático", subrayó.
Asimismo, destacó la importancia de atender la crisis del costo de vida que, según la Organización de las Naciones Unidas (ONU), ha empujado a 71 millones de personas en el planeta a la pobreza extrema.
Con información de Sputnik