Terrorismo chileno en Tacna y Arica
La chilenización de las Provincias Cautivas.
El robo de un pueblo no prescribe nunca.
Escribe: César Vásquez Bazán
Iglesia de San Ramón en Tacna, 1909. Fue clausurada por orden del intendente chileno Máximo Lira.
Sacerdotes peruanos expulsados de Tacna y Arica en 1910 por el enemigo chileno. De izquierda a derecha, sentados, aparecen José M. Florez Mextre y J. Vitaliano Berroa, párrocos de Tacna y Arica respectivamente. De pie: Francisco Quiroz, teniente cura de Tacna; Juan Indacochea Zevalloz, cura de Codpa; José Felix Cáceres, cura de Tarata; Juan G. Guevara, auxiliar de la Parroquia de Arica. No aparece en la foto Esteban Toccafondi, cura de Sama.
Diario peruano “La Voz del Sur” de Tacna. El 18 de julio de 1911 fue destruido por una turba de matones chilenos que también asaltaron los diarios peruanos El Tacora y El Morro de Arica.
Destrucción en Tacna tras el asalto de fuerzas de choque chilenas en 1926
A fin de intentar ganar el eventual plebiscito que debería decidir la suerte de Tacna y Arica, el enemigo chileno implantó en esas circunscripciones un régimen de terrorismo sistemático y persecución en contra de los peruanos.
El gobierno de Chile planificó premeditada y deliberadamente la realización de diversas acciones violentas en contra de los peruanos de Tacna y Arica. Organizó bandas de matones chilenos y de falsos “hijos de Tacna y Arica” quienes, premunidos de armas de fuego, latigos y garrotes procedieron a llevar adelante los designios del gobierno de Chile.
Entre las acciones de terrorismo sistemático, persecución y hostilización de peruanos ejecutadas por las autoridades chilenas y sus rufianes pueden citarse las siguientes:
1. Clausura de escuelas peruanas
2. Clausura de periódicos peruanos
3. Expulsión de párrocos peruanos
4. Expulsiones en masa de peruanos
5. Conscripción forzada de peruanos en el ejército del enemigo chileno
6. Asesinato de peruanos
7. Secuestro de peruanos confinados a Chile
8. Flagelaciones de peruanos
9. Tumultos callejeros en contra de peruanos y sus propiedades
10. Saqueos de negocios peruanos
11. Prohibición de celebración de efemérides peruanas
12. Prohibición del uso de la bandera y otros símbolos de la Nación Peruana
13. Boicoteo de trabajadores
14. En los liceos, los estudiantes peruanos eran obligados a llevar una escarapela del enemigo chileno y cantar el himno de ese país.
Por supuesto, Chile quisiera que los peruanos “olvidáramos” los crímenes y abusos de la “chilenización”, para continuar ejerciendo hoy, en 2012, dominación sobre los territorios peruanos de Tacna y Arica. Los peruanos debemos tomar conciencia de los actos delincuenciales que Chile fue capaz de ejecutar impunemente en Tacna y Arica para apoderarse transitoriamente de ellas.
Perú nunca olvidará esos faltamientos.
¡El robo contra un pueblo no prescribe nunca!
La chilenización entre 1908 y 1909
Raúl Porras Barrenechea
Chile inculpó al Perú ante los cancillerías americnas de no querer llevar a cabo el plebiscito. en 1908 y 1909 se intensificó en las provincias cautivas el proceso de la chilenización. Se expulsó a los maestros peruanos, se llevó gran número de obreros chilenos para el ferrocarril de Arica a La Paz. se prohibió toda demostración peruanista a la población (uso de bandera, himno, celebración de efemérides peruanas). Las peruanos empezaron a ser sistemáticamente hostilizados y expulsados.
Fuente: Porras Barrenechea, Raúl. 1930. Historia de los límites del Perú. Segunda edición. Lima: Librería Francesa Científica y Casa Editorial E. Rosay, páginas 137 y 138.
La chilenización entre 1916 y 1919
Raúl Porras Barrenechea
EL PROBLEMA DURANTE LA GRAN GUERRA MUNDIAL. – De 1916 a 1919 se sucedieron atropellos inauditos contra los peruanos de Tacna, Arica y Tarapacá. Se enroló a la fuerza en el ejército chileno a trescientos jóvenes peruanos. En diciembre de 1918 comenzaron las expulsiones en masa de los peruanos de Iquique, Tacna y Arica. Las ligas patrióticas chilenas iniciaron sus demostraciones públicas en contra de los peruanos; apedreamientos, insultos, secuestros, saqueos. El Cónsul del Perú en Iquique fue expulsado por una poblada y embarcado a la fuerza para el Perú. Esto determinó por parte del Perú el retiro de todos sus cónsules de Chile y la ruptura de relaciones consulares.
Estas explosiones de odio chileno coincidían con la exaltación del sentimiento reivindicacionista peruano. Las doctrinas proclamadas por el presidente Wilson en sus célebres catorce puntos --más tarde consagrados por el Tratado de Versalles-- anunciaban el término de las situaciones de fuerza en el mundo, el apoyo moral a los pueblos débiles, la desaparición del derecho de conquista y el desconocimiento de los tratados firmados por la violencia. En el Perú surgió entonces un apasionado anhelo nacional que creyó posible la anulación del tratado de Ancón, violado flagrantemente por Chile y la recuperación total de Tacna, Arica y Tarapacá.
Fuente: Porras Barrenechea, Raúl. 1930. Historia de los límites del Perú. Segunda edición. Lima: Librería Francesa Científica y Casa Editorial E. Rosay, página 143.
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