Un pasajero que esperaba sentado en la estación del tren subterráneo de Filadelfia, en los Estados Unidos, reaccionó a tiempo para lanzarse a salvar la vida de un hombre de 63 años de edad, que había caído a los rieles.
Otras personas sólo miraron atónitos sin poder hacer nada ante el temor de ser arrollados.
El valiente salvador se llama Christopher Knafelc, 32, dijo a Philly.com que vio al hombre caer con el extremo de su ojo y no dudó ni un segundo en saltar al rescate, mientras la gente que miraba se aglomeraba.
Knalfec pensó que tendría de cinco a diez minutos para retirar al hombre (que se veía muy adolorido) de la vía antes del paso del siguiente tren, lo que dio tiempo para detener el tráfico.
El jefe de la policía local, de Septa, Tom Nestel, lo llamó héroe, quien dijo no imagina no ayudar a alguien otra vez en la misma situación.
Tras sacarlo de la vía, le preguntó qué sentía al hombre, pero no respondía, por lo que trató de estabilizar su cabeza y cuello, dijo a la cadena CBS de Filadelfia. Posteriormente el hospital informó que el rescatado sufrió contusiones, pero ninguna de gravedad.
Las líneas del tren están cargadas de mucha electricidad, lo cual puede ser mortal.
