Dictadura de Kadafi mata a más de 400 manifestantes en Libia
Contagiados por la ola de manifestaciones para derrocar a dictadores que sacude al mundo árabe, los libios ya llevan varios días de protesta, en los cuales la represión del dictador Muamar Al Kadafi, con 42 años en el poder, ya ha matado a más de 400 personas.
Contagiados por la ola de manifestaciones para derrocar a dictadores que sacude al mundo árabe, los libios ya llevan varios días de protesta, en los cuales la represión del dictador Muamar Al Kadafi, con 42 años en el poder, ya ha matado a más de 400 personas.
Para arremeter contra su pueblo, Kadafi no ha dudado en disparar desde helicópteros ni en utilizar cohetes y mercenarios, además de suspender los servicios de internet, temiendo la comunicación e información entre las personas.
Diversas agencias internacionales reportan centenares de heridos en hospitales saturados de ellos, los cuales serían un millar.
La televisión satelital Al Jazeera afirmó que el Ejército lanzaba cohetes RPG contra los manifestantes en Benghazi, la segunda ciudad más importante del país y centro de las protestas contra Kadafi.
Según Al Jazeera, el régimen movilizó hacia Benghazi a centenares de mercenarios provenientes de Mali, quienes reprimen despiadadamente a los libios, quienes no se amedrentan y persisten en su protesta.
Fuentes vinculadas a la oposición aseguraron que el ministro del Interior, Abdel Fatah Yunis, habría renunciado para plegarse a los manifestantes.
Asimismo, el representante permanente del país ante la Liga Árabe, Abdel Moneim Al Honi, anunció ayer que dimitía de su cargo para “unirse a la revolución” y protestar contra “la represión y la violencia” en el país. “Presenté mi dimisión para protestar contra los actos de represión y de violencia contra los manifestantes y me uno a las filas de la revolución”, afirmó el diplomático. Además, la tribu de Al Farjane, de la zona de Sirte, decidió levantarse contra el régimen de Kadafi.
Estados Unidos reclamó a Libia que ponga fin a la violencia. “El número de víctimas no es conocido, pero pedimos que se atiendan las demandas de los manifestantes y rechazamos la represión con armas de fuego contra las personas indefensas”, señaló el portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley.
Kadafi tiene planes de perpetuarse en monarquía instalando a su hijo en el poder, quien dio un discurso prometiendo reformas, lo cual no ha calmado los ánimos.
En tanto, las protestas recrudecen multiplicándose los incendios y saqueos en medio de versiones de que Kadafi huyó de Trípoli.
Diversas agencias internacionales reportan centenares de heridos en hospitales saturados de ellos, los cuales serían un millar.
La televisión satelital Al Jazeera afirmó que el Ejército lanzaba cohetes RPG contra los manifestantes en Benghazi, la segunda ciudad más importante del país y centro de las protestas contra Kadafi.
Según Al Jazeera, el régimen movilizó hacia Benghazi a centenares de mercenarios provenientes de Mali, quienes reprimen despiadadamente a los libios, quienes no se amedrentan y persisten en su protesta.
Fuentes vinculadas a la oposición aseguraron que el ministro del Interior, Abdel Fatah Yunis, habría renunciado para plegarse a los manifestantes.
Asimismo, el representante permanente del país ante la Liga Árabe, Abdel Moneim Al Honi, anunció ayer que dimitía de su cargo para “unirse a la revolución” y protestar contra “la represión y la violencia” en el país. “Presenté mi dimisión para protestar contra los actos de represión y de violencia contra los manifestantes y me uno a las filas de la revolución”, afirmó el diplomático. Además, la tribu de Al Farjane, de la zona de Sirte, decidió levantarse contra el régimen de Kadafi.
Estados Unidos reclamó a Libia que ponga fin a la violencia. “El número de víctimas no es conocido, pero pedimos que se atiendan las demandas de los manifestantes y rechazamos la represión con armas de fuego contra las personas indefensas”, señaló el portavoz del Departamento de Estado, Philip Crowley.
Kadafi tiene planes de perpetuarse en monarquía instalando a su hijo en el poder, quien dio un discurso prometiendo reformas, lo cual no ha calmado los ánimos.
En tanto, las protestas recrudecen multiplicándose los incendios y saqueos en medio de versiones de que Kadafi huyó de Trípoli.