EE. UU. expresa alarma por desastre nuclear japonés
Estados Unidos advirtió que los esfuerzos realizados en Japón para evitar la fusión de los reactores nucleares de Fukushima pueden fracasar.
Estados Unidos advirtió que los esfuerzos realizados en Japón para evitar la fusión de los reactores nucleares de Fukushima pueden fracasar.
Greg Jaczko, jefe de la Comisión Estadounidense de Regulación Nuclear (NRC), dijo que los trabajadores de emergencia en el área cercana a la planta podrían estar expuestos a dosis “potencialmente letales” de radiación.
La planta nuclear de Fukushima fue seriamente dañada por el potente terremoto de 9.0 grados que golpeó a Japón este 11 de marzo, seguido por un feroz tsunami que devasto varias ciudades.
Steven Chu, secretario de Energía de los EE. UU. Advirtió que el desastre es más serio que la fusión parcial ocurrida en la planta nuclear Three Mile Island de Pennsylvania en 1979.
La NRC indicó que el problema no es el reactor 4, sino una poza que almacena barras que fueron sacadas del reactor cuando fue apagado para mantenimiento antes del terremoto, porque ahora la poza está completamente seca, por lo cual las barras están expuestas al aire, por tanto, recalentándose y dejando escapar material radiactivo extremadamente peligroso.
La empresa que opera la planta señaló que este problema no causará una explosión nuclear, pero eleverá el nivel de emisiones radiactivas.
El Departamento de Estado de los EE. UU. Urgió a los estadounidenses que vivan dentro de un radio de 80km de la planta a abandonar el área, mientras que se ha entregado tabletas contra los efectos de la radiación a los militares de los EE. UU. en Japón.
Por su parte, las autoridades británicas han pedido a sus ciudadanos salir de Tokio y de las zonas ubicadas hacia el norte de la capital.
Por su parte, el diario The Guardian difundió cables de Wikileaks en los que se detalla el encubrimiento de las autoridades japonesas de accidentes nucleares y del peligro de instalaciones nucleares obsoletas, que no podrían resistir más allá de sismos de 6.0 grados, lo cual ocultaron a su país (ver Wikileaks: Japón encubrió accidentes nucleares).
La planta nuclear de Fukushima fue seriamente dañada por el potente terremoto de 9.0 grados que golpeó a Japón este 11 de marzo, seguido por un feroz tsunami que devasto varias ciudades.
Steven Chu, secretario de Energía de los EE. UU. Advirtió que el desastre es más serio que la fusión parcial ocurrida en la planta nuclear Three Mile Island de Pennsylvania en 1979.
La NRC indicó que el problema no es el reactor 4, sino una poza que almacena barras que fueron sacadas del reactor cuando fue apagado para mantenimiento antes del terremoto, porque ahora la poza está completamente seca, por lo cual las barras están expuestas al aire, por tanto, recalentándose y dejando escapar material radiactivo extremadamente peligroso.
La empresa que opera la planta señaló que este problema no causará una explosión nuclear, pero eleverá el nivel de emisiones radiactivas.
El Departamento de Estado de los EE. UU. Urgió a los estadounidenses que vivan dentro de un radio de 80km de la planta a abandonar el área, mientras que se ha entregado tabletas contra los efectos de la radiación a los militares de los EE. UU. en Japón.
Por su parte, las autoridades británicas han pedido a sus ciudadanos salir de Tokio y de las zonas ubicadas hacia el norte de la capital.
Por su parte, el diario The Guardian difundió cables de Wikileaks en los que se detalla el encubrimiento de las autoridades japonesas de accidentes nucleares y del peligro de instalaciones nucleares obsoletas, que no podrían resistir más allá de sismos de 6.0 grados, lo cual ocultaron a su país (ver Wikileaks: Japón encubrió accidentes nucleares).