El espionaje de Washington refleja la "caída de la calidad de su democracia", dice Schulz. Los líderes europeos muestran su indignación
El presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, a su llegada a Bruselas.
El espionaje puede empezar a pasar factura a EEUU. Los líderes europeos se han mostrado este jueves unánimes en su indignación por la supuesta vigilancia de Washington a ciudadanos e instituciones de la UE -incluyendo el móvil de la canciller alemana, Angela Merkel- aunque han evitado hablar de emitir algún tipo de condena más allá de un refuerzo de las normas comunitarias sobre protección de datos.
Sólo la Eurocámara ha pedido hasta ahora represalias. En concreto, el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, ha reclamado suspender de manera temporal las negociaciones del acuerdo de libre comercio con EEUU. El eurodiputado socialdemócrata alemán ha declarado que el espionaje de EEUU refleja la "caída de la calidad de su democracia". Ya el miércoles, la Eurocámara reclamó la suspensión del acuerdo para transferir datos bancarios europeos a Washington para la lucha antiterrorista. La Comisión ha replicado que no existen indicios de que la administración norteamericana haya incumplido este pacto y que por ello seguirá en vigor.
Schulz ha dejado claro que está "realmente a favor" del acuerdo de libre comercio con EEUU y ha confiado en que se negocie y se cierre "en un plazo próximo" pero se ha preguntado si "no es necesario tras todos los acontecimientos de los últimos meses parar un momento y discutir". El presidente de la Eurocámara ha dejado claro que si ambas partes van a las negociaciones pero tienen "sensación" de que la otra "saben todo" en su opinión "no podemos confiar en el otro".
Schulz: "La canciller Merkel no es mi mejor amiga, pero es la canciller de mi país"
"La canciller Merkel no es mi mejor amiga, pero es la canciller de mi país", ha ironizado el socialdemócrata alemán, que ha reconocido que estaría "muy interesado" en la respuesta de la Casa Blanca si servicios de inteligencia europeos espiarán a su presidente Barack Obama. El presidente de la Eurocámara ha asegurado además que en su caso ha dado "garantías" a las autoridades estadounidenses que "el Parlamento Europeo no está planeando ataques terroristas contra Estados Unidos" ironizando así sobre las revelaciones de que la oficina de la Eurocámara en Washington también figura entre los objetivos espiados.
Schulz no ha sido el único en referirse al escándalo. La propia Merkel ha avisado a Obama de que "espiarse entre amigos es inaceptable" en una declaración a su llegada a la reunión del Consejo Europeo. El espionaje de EEUU -que no figuraba en la agenda- se ha convertido en el protagonista absoluto de la cumbre, eclipsando al resto de cuestiones que estaba previsto abordar este viernes como la unión bancaria o la economía digital.
Con la misma contundencia se ha expresado la vicepresidenta de la Comisión, Viviane Reding, para quien "los más recientes escándalos de espionaje muestran que la protección de datos debe aplicarse a todo el mundo, ya sea a los correos electrónicos de los ciudadanos o al teléfono móvil de Merkel". Reding ha pedido a los Gobiernos que apoyen su propuesta para reforzar las normas de la UE sobre protección de datos en Internet. "Esta sería la declaración de independencia de Europa. Sólo entonces Europa puede hacer frente de forma creíble a Estados Unidos", ha sostenido.
Barroso alerta de que el espionaje masivo puede conducir al totalitarismo
Por su parte, el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, ha alertado de que el espionaje masivo puede conducir al totalitarismo. "En una parte de Alemania había una policía política que espiaba en la vida de la gente cada día. Así que sabemos lo que significa el totalitarismo. Y sabemos qué ocurre cuando el Estado usa poderes que se entrometen en la vida de las personas", ha subrayado. El primer ministro belga, Elio Di Rupo, ha pedido por su parte a Estados Unidos que cese sus actividades de espionaje a los socios europeos y ha defendido que la UE adopte medidas para protegerse. "No podemos aceptar de nadie este espionaje sistemático y habrá que tomar medidas -ha afirmado-. No podemos imaginar medidas únicamente a escala de un país, como Bélgica que es un país de talla mediana. Hay que tomar medidas europeas".
Más escéptico se ha mostrado el primer ministro finlandés, Jyrki Katainen, que ha expresado sus dudas sobre la veracidad de las acusaciones y ha apuntado que ninguna norma europea hubiera frenado a la NSA. "A nadie le gusta que le escuchen, legal o ilegalmente", ha reconocido Katainen. "No sé qué podemos hacer a nivel europeo porque, si esto ha pasado, ninguna legislación europea lo hubiera impedido", ha agregado. También el primer ministro sueco, Fredrik Reinfeldt, ha hecho un llamamiento a la "prudencia". "Necesitamos medidas para lograr el equilibrio entre la búsqueda de información y las garantías de que se respeta la integridad personal", ha dicho Reinfeldt, que ha recordado la necesidad de acceder a cierta información como parte de la lucha contra el terrorismo.
El primer ministro irlandés, Enda Kenny, se ha declarado "consternado" por el supuesto espionaje pero ha admitido: "Siempre trabajo sobre la base de que las llamadas que hago están siendo escuchadas". Y su homólogo holandés, Mark Rutte, ha dicho que no le consta que Estados Unidos espíe también sus llamadas. Las condenas al espionaje de Estados Unidos han llegado también del primer ministro italiano, Enrico Letta, -"Es inconcebible e inaceptable que se dé una actividad de espionaje de este tipo", ha dicho- y del vicecanciller austriaco, Michael Spindeleger, que ha reclamado una investigación, porque "no puede ser que entre países amigos haya espionaje", ha señalado.
Europa Press, 24.10.2013