En el primer debate entre los principales candidatos a la presidencia de los Estados Unidos, el candidato republicano Donald Trump remeció a su oponente, la demócrata Hillary Clinton al exponer los estruendosos fracasos del gobierno del cual ella forma parte, en especial en la crisis de empleo y la lucha contra el terrorismo internacional, así como la violencia dentro del país.
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Trump reiteró que Clinton creó la banda terrorista Estado Islámico, y advirtió que con los dos sucesivos gobiernos de Obama y Clinton, lejos de ser combatido, el terrorismo islámico se ha multiplicado en un número cada vez mayor de países, todo esto acompañado de un gigantesco gasto que implica una pesada carga para los estadounidenses mientras la situación en Oriente Medio es un caos.
Ante tales argumentos los manotazos de ahogado de Clinton poco hacían para tapar tremendo fracaso y recurrió a ataques rechazados por Trump, como dichos presuntamente racistas, o su declaración de impuestos.
Trump retó a Clinton a mostrar sus correos electrónicos y si lo hace él pondría a disposición del público sus declaraciones de impuestos, a lo cual Hillary Clinton se negó y sólo mencionó que en esos correos hay errores que ya no cometería, a lo cual Trump espetó que no se trata de errores, sino de hechos muy graves.
Clinton tampoco pudo contra la verdad de la tremenda crisis de falta de empleo cuando Trump señaló que su país continúa perdiendo miles de empleos que se van a México, China y otros países porque los empresarios se ven obligados a escapar de la desproporcionada carga tributaria que les impone el gobierno, por lo cual él reducirá los impuestos para que las empresas que han salido del país regresen a invertir en los Estados Unidos y generen empleo. Clinton trató de atacar diciendo que Trump pretende favorecer a los ricos, pero Trump respondió que se trata de favorecer a los desempleados y las clases medias que están sin trabajo, lo cual lo ilustró con alarmantes cifras.
El candidato republicano también cuestionó con cifras la escalada de violencia y muertes y el hecho de que quienes lo sufren más son los negros y los hispanos, y todo con este gobierno del cual Clinton participa. Ella trató de desviar la atención con supuestos dichos racistas de Trump, lo cual él negó.
Otro ataque de Clinton fue el que Trump haya elogiado el liderazgo del presidente ruso Vladimir Putin cuando Rusia está usando la información obtenida por hackers para atacar a los Estados Unidos, como se ha visto en recientes casos, por ejemplo en las sustancias prohibidas consumidas por deportistas olímpicos estadounidenses, a lo cual Trump respondió que Rusia está aprovechando de esa información, pero no se sabe de dónde son los hackers, si de China, Rusia, o cualquier otro país, pero lo importante y terrible es que el gobierno Obama-Clinton no ha sabido protegerse de los hackers.
Mientras Clinton trataba de destacar su experiencia de gobierno, Trump arremetió diciendo que esa experiencia es mala, aludiendo a su fracasado gobierno con Obama.
A Trump se le vio mucho más seguro de lo que decía, en cambio a Clinton se le vio varias veces turbada por la evidencia de las cifras y los hechos graves en el gobierno demócrata actual.
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