Fuentes oficiales rusas aseguran que siguieron el recién lanzado misil norcoreano e insinúan que de haber supuesto peligro podían haberlo neutralizado.
“La defensa antiaérea del Distrito Militar Oriental (de la Federación Rusa) tiene la capacidad de eliminar las posibles amenazas que puedan derivarse de las pruebas de Corea del Norte”, sentencia el general ruso Vladímir Bogatíriov, analista militar en declaraciones hoy domingo a la agencia rusa Interfax, recogidas por el canal RT.
Vista exterior de las instalaciones del sistema antimisiles balísticos ruso A-135 o ABM-3 cerca de Moscú.
El experto no ve por otra parte intención ofensiva alguna en las pruebas de Pyongyang, a la que atribuye más bien la intención de garantizar su propia seguridad frente a la amenaza militar estadounidense, así como frente a los aliados de Washington en la región.
El análisis de Bogatíriov acompaña en la prensa rusa un comunicado difundido por el Ministerio de Defensa ruso, según el cual, “los sistemas de alerta temprana sobre ataques de misiles detectaron hacia las 23.30, hora de Moscú (20.30 GMT) del 13 de mayo, un misil balístico lanzado desde el territorio de la República Popular Democrática de Corea”.
La defensa antiaérea del Distrito Militar Oriental (de la Federación Rusa) tienen la capacidad de eliminar las posibles amenazas que puedan derivarse de las pruebas de Corea del Norte”, considera el general y analista militar ruso Vladímir Bogatíriov.
Los sistemas rusos siguieron la trayectoria del misil, según la nota, “durante los 23 minutos que duró hasta caer en el centro del mar de Japón”, en un desplazamiento que se produjo “en dirección contraria y a una distancia significativa del territorio ruso”, por lo que la prueba “no representó peligro alguno para Rusia”.
Según “expertos en misiles” citados por el diario estadounidense The New York Times, el arma ensayada era “un misil balístico de alcance intermedio que podría atacar bases estadounidenses clave en el océano Pacífico, incluidas las de Guam”, si bien los análisis de los registros obtenidos se mantienen para mayor seguridad.
El lanzamiento es el primero por parte de Corea del Norte desde el acceso a la presidencia de su vecino sureño, el pasado miércoles 10, del socialdemócrata Moon Jae-in —que ha expresado su deseo de viajar al Norte—, dentro de un nuevo período de tensiones entre Washington y Pyongyang.
Corea del Norte ha elegido para su nueva prueba militar un momento en que su mayor apoyo, China, recibe en su capital a distintas delegaciones extranjeras —incluida una de Pyongyang— en un foro sobre su proyecto de desarrollo comercial transnacional Nueva Ruta de la Seda, del que medios influyentes de EE.UU. prevén que contribuya a reducir la influencia norteamericana en Asia.
Hispantv, 14.05.2017