El número de muertos tras el ataque israelí al campo de Rafah es de al menos 45, según el Ministerio de Salud de Gaza. La zona es un campamento que albergaba a palestinos desplazados, que huyen de la masacre en otros puntos de Gaza, lo cual demuestra una vez más la cobardía del régimen genocida israelí.
La masacre de Rafah de ayer dejó 45 fallecidos, entre ellos 23 mujeres, niños y ancianos. Hay otros 249 heridos, señaló el Ministerio de Salud de Gaza en una actualización.
Como siempre lo hace para maquillar sus ataques contra civiles, Israel aduce que hay atacantes en el lugar. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron los ataques aéreos y declararon: “Un avión de las FDI atacó hace poco tiempo un complejo de Hamas en Rafah en el que importantes terroristas de Hamas estaban operando”.
En una declaración, las FDI dijeron que el ataque se llevó a cabo contra “objetivos legítimos según el derecho internacional, mediante el uso de municiones precisas y sobre la base de inteligencia precisa que indicaba el uso de la zona por parte de Hamás”.
Las FDI también tomaron conocimiento de los informes de daños civiles resultantes del ataque aéreo y el fuego posterior y dijeron que “el incidente está bajo revisión”.
Entre los objetivos del ataque aéreo se encontraban dos altos funcionarios de Hamás: Yassin Rabia y Khaled Nagar, reportan medios internacionales.
Hamás condenó los ataques aéreos y en una declaración escribió: “A la luz de la horrible masacre sionista cometida esta tarde por el criminal ejército de ocupación contra las tiendas de campaña de los desplazados… hacemos un llamado a las masas de nuestro pueblo en Cisjordania, Jerusalén, los territorios ocupados territorios y en el extranjero para levantarse y marchar airadamente contra la masacre sionista en curso contra nuestro pueblo en el sector”.
Esta escalada se produce en medio de una preocupación internacional constante, ya que la Corte Internacional de Justicia ordenó recientemente a Israel que cese sus ataques contra Rafah. La situación sigue siendo tensa mientras el conflicto continúa afectando a los civiles y exacerbando la crisis humanitaria en Gaza.
