En Pensilvania, Estados Unidos, un informe de un gran jurado divulgado el martes reveló que más de 300 sacerdotes católicos abusaron sexualmente de mil niños –y posiblemente de muchos más– en el transcurso de siete décadas y que este abuso fue encubierto por las autoridades de la Iglesia. El informe especifica que los sacerdotes violaron a niñas y niños. Menciona como ejemplo un caso en que un sacerdote violó a una niña en el hospital después de que le extirparan las amígdalas, y otro en el que un sacerdote embarazó a una niña y luego se encargó de hacer las gestiones necesarias para que abortara. El informe también indica que la Iglesia utilizó una serie de tácticas para ocultar el abuso, como mentirle a la comunidad sobre por qué un sacerdote fue retirado de la parroquia, transferir sacerdotes pedófilos en lugar de despedirlos, y ocultar las denuncias de abuso en un “expediente secreto”. Un sacerdote que había sido acusado de abuso infantil en reiteradas ocasiones solicitó –y le fue concedida– una carta de recomendación para trabajar en Disneylandia. Las siguientes son palabras del fiscal general de Pensilvania, Josh Shapiro.

Por segunda vez este año, Facebook cerró la página del canal de televisión latinoamericano Telesur English, sin dar explicaciones. En una declaración, Telesur afirmó: “Esto es un hecho alarmante, en vista de los recientes cierres de páginas que no se ajustan a la narrativa convencional”. Telesur es una emisora internacional que recibe fondos de los Gobiernos de Venezuela, Cuba, Nicaragua, Uruguay y Bolivia. La semana pasada, Facebook también cerró temporalmente otra página relacionada con Venezuela, la del sitio de noticias Venezuela Analysis, señaló Democracy Now.

En Yemen, miles de dolientes se reunieron en la ciudad de Saada el lunes para asistir a los funerales de las 51 personas –entre ellas 40 niños– que murieron la semana pasada a raíz de un ataque aéreo que tuvo como blanco un autobús escolar. El bombardeo aéreo fue llevado a cabo por la coalición encabezada por Arabia Saudí, que cuenta con el respaldo de Estados Unidos. Las imágenes publicadas en línea sugieren que en el ataque aéreo se utilizó una bomba Mark-82, fabricada en Estados Unidos. Los dolientes condenaron el ataque a los escolares.