Con la finalidad de determinar el nivel de conocimientos, actitudes y prácticas que la comunidad del distrito de Tupe tiene con respecto a su salud, la Dirección Ejecutiva de Salud Integral de la Dirección de Salud Lima (Diresa Lima) realizó una investigación sobre este pueblo de la etnia Jaqaru, para dar un diagnóstico de la situación de salud de su población.
El equipo conformado por diversos profesionales tuvo también por objetivo determinar la relación intercultural del servicio de salud con la población; identificar las brechas sanitarias existentes y determinar el nivel de conocimientos, actitudes y prácticas de la población, informó José Darwin Cuadros Maco, director general de la Diresa Lima.
Los resultados serán dados a conocer en aproximadamente 15 días, y permitirán identificar las prioridades de intervención, así como reforzar el trabajo del Gobierno Regional de Lima sobre proyectos de mejora en esa zona altoandina, refirió el funcionario.
Vulnerabilidad
La población estimada en esta localidad es de 928 personas, mayoritariamente ancianos y niños, quienes viven en condiciones de vulnerabilidad por su difícil acceso a servicios de salud de mayor complejidad. Este pueblo enfrenta además el proceso inexorable de la extinción de su idioma nativo y la pérdida de sus conocimientos tradicionales, subrayó.
El equipo de investigación de la Diresa Lima informó que este pueblo mantiene sus costumbres con respecto a la medicina, el cual es motivo de investigación y aprendizaje. Sin embargo, carecen de conocimientos de medicina moderna. También se continuará la investigación en comunidades indígenas de la jurisdicción de dicha dependencia.
Cuadros Maco consideró necesario determinar los indicadores de salud, las características socioculturales, las alternativas de medicina tradicional actual; y la organización así como identificar a otros actores sociales que puedan tener presencia en la zona.
Tupe
San Bartolomé de Tupe, es un pueblo Jaqaru de costumbres ancestrales, ubicado en la provincia de Yauyos (Lima), en medio de empinadas y rocosas montañas; al pie del Apu Tupinachka. Para llegar se debe recorrer a pie un antiguo camino durante seis horas, partiendo desde la localidad de Catahuasi, camino que utilizó el equipo de profesionales de la Diresa Lima.
Allí todavía se puede ver a las mujeres utilizando trajes como los que utilizó la antigua mujer del Inca, la Colla, con sus grandes topus y mantilla. El dialecto que utilizan sus habitantes proviene de la época Pre- Inca y se encuentra en proceso de extinción, si se considera que una lengua está en riesgo de desaparecer si sólo 500 personas la hablan.