Aseguramiento universal, una mafia que huele a Canaán y otros roedores. II

“Enfermedades catastróficas”: negocios son negocios


En el Art.° 12 sorprendentemente se habla de planes para “enfermedades catastróficas” y “de alto costo”. Ya sabemos que las “enfermedades catastróficas” están relacionadas con todos los siniestros producidos por desastres naturales, tan frecuentes en el país. De “alto costo”, es cualquier enfermedad que incluso siendo simple se complica, también el cáncer, los transplantes, la insuficiencia renal y diálisis, etc.


En el Art.° 13 se habla de planes complementarios en salud, que serán ofertados por las entidades prestadoras de salud. Hasta este punto ya hay un asunto grave de hecho. Se planea alegremente dar salud usando los fondos de Essalud. Cuando se habla de los planes de aseguramiento básico, conocido ahora como “capa simple” o algo equivalente al SIS, se trata de un sistema con grandes limitaciones en el manejo integral de la persona, sin contar que por la manera como está establecido, su aplicación ha dado situaciones dolosas, como el escándalo por el terremoto de Ica.

¿Por qué les preocupa un fondo para enfermedades catastróficas, cuando el Minsa siempre ha atendido estos siniestros?

La respuesta es que buscarán financiamiento, probablemente de forma mayoritaria de Essalud, porque la atención de estos pacientes no debería perjudicar a las entidades prestatarias de Essalud, puesto que dentro de poco serán empresas lucrativas privadas, es decir, sólo trabajan para ganar, no con un fin de buscar la salud de la población como un fin, sino que el fin es la utildad.

En el proyecto no se dice nada sobre las enfermedades de alto costo, ni de su financiamiento ni sobre quiénes se harían cargo. Está referido probablemente a los planes complementarios, que ofrecen coberturas según la capacidad económica del cliente (ya no es paciente, sino cliente,) porque la salud será un negocio.

Esto quiere decir que el afán de lucro prevé ocuparse de las capas simples (enfermedades como gastritis, dermatitis, etc., que no requieren mucho gasto), o la llamada “carnecita” que es de donde quieren lucrar las empresas privadas. Pero no dice nada de los “huesos” (cáncer, hemodiálisis, transplantes). Es lo mismo que hicieron con la creación de las EPS para golpear a Essalud y dar de ganar a unas empresas, que se disputaron por invitar a los asegurados que ganan más, para atenderlos con capa simple, pero para “tirarlos” de vuelta a Essalud cuando esté aquejado por una dolencia que requiera de altos costos, como los “huesos”, es decir, cáncer, transplantes, etc.
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Ver:

Aseguramiento universal, una mafia que huele a Canaán y otros roedores. I

Aseguramiento universal, una mafia que huele a Canaán y otros roedores. III

Aseguramiento universal, una mafia que huele a Canaán y otros roedores. IV