Aníbal Sierralta alerta sobre interferencia chilena en elecciones
Aníbal Sierralta alerta de cómo en el Perú algunos nos asustan con Chávez y no dicen nada de cómo Piñera interfiere en la campaña electoral en el Perú. |
Elecciones e interferencias internacionales
Aníbal Sierralta Ríos, profesor de la Pontificia Universidad Católica del Perú y del CAEN, es autor de “El impacto del comercio internacional en la cultura y en la política”. Dicho trabajo iniciado en 1997, se basa en su libro anterior titulado “Internacionalización de las empresas latinoamericanas” y analiza los desafíos comerciales entre el Perú y sus países vecinos. Lo entrevistamos para conocer su opinión respecto de los candidatos a la presidencia y nos alerta que algunos digan cuidado con que venga Chávez, pero nadie dice cuidado con PIÑERA que opina sin tapujos sobre cuál sería el mejor candidato para las relaciones peruano-chilenos.
¿Cuáles son los argumentos para que Ud. hable de fricciones comerciales en su libro?
El intercambio comercial propicia vínculos empresariales, pero, aunque parezca paradójico, también genera conflictos ya que están de por medio diferentes actores, como el Estado, las transnacionales, las ong, los gremios y los organismos multilaterales, que tienen distintos objetivos.
Todo Estado busca el bienestar de su población de tal manera que debe negociar con esos actores para conciliar intereses, con frecuencia contrapuestos. Para ello se requiere de un Estado fuerte y un equipo de funcionarios con poder y capacidad de negociación a fin de tratar con las transnacionales que actúan siempre protegidas por sus Estados.
Un país, como Chile, con mayor presencia comercial y un significativo stock de inversiones, puede influir en las decisiones políticas del país receptor, para satisfacer sus intereses.
¿Pero nosotros tenemos una relación comercial fluida con Chile?
Sí, claro, ellos tienen el control de servicios fundamentales como el transporte aéreo, el marítimo y con socios peruanos buscan consolidarse en los puertos del Callao y Paita, pues ya tienen el sur. Manejan las principales empresas de tecnología informática que es el soporte de las comunicaciones telemáticas internacionales. Están en el sistema financiero y han ingresado hasta en los servicios de salud. De tal manera que los servicios son de ellos. Y este gobierno les ha dado una buena ayuda con las normas sobre exportación de servicios.
Nosotros solo tenemos una inversión significativa en cemento, el resto son cebicherías. El comercio es exportación de servicios y dominio tecnológico, no exportación de materias primas.
¿De qué manera actúan esos actores?
Fíjese, cuando el candidato Humala ofreció, en días pasados, constituir una empresa aérea nacional, necesaria para exportar nuestras mercaderías por que carecemos de flota aérea o marítima, al día siguiente y durante tres días continuos le cayó encima toda la prensa calificándolo de estatista y demonio. ¿Quién o qué inversión alentó esa campaña?
Apenas Humala habló de promover una empresa área nacional de inmediato se desató una tormenta. ¿Quién o qué inversión alentó esa campaña? Se pregunta nuestro entrevistado. |
¿Ud. cree que en esta campaña presidencial hay interferencia política?
Los grandes inversores extranjeros tienen sus candidatos. Toledo durante su gobierno alentó la inversión chilena, tuvo dos asesores chilenos en Palacio de Gobierno y un día antes de cumplir su mandato, eliminó TANS, la única línea aérea peruana. Kuczynski es socio de transnacionales chilenas, ha facilitado la venta de gas para el crecimiento industrial de nuestros vecinos y es director de transnacionales chilenas, como él mismo lo admite.
Algunas personas, repitiendo las consignas del 2006, dicen: cuidado con que venga Chávez, pero nadie dice cuidado con PIÑERA que opina sin tapujos sobre cuál sería el mejor candidato para las relaciones peruano-chilenos.
Piñera ha dicho que las relaciones sufrirían un cambio si gana Ollanta, ¿cuál sería ese cambio?
Evidentemente es una intromisión condenable. Sí creo que habría un cambio: se establecerían relaciones con dignidad.
Pero cualquier Presidente electo, con un mínimo de respeto, tendrá que renegociar el TLC con Chile, cumpliendo el mandato del Tribunal Constitucional.
¿En qué sentido?
El nuevo gobierno tendrá que precisar el concepto y ámbito de territorio. El Tribunal Constitucional señala que el Tratado: “no es inconstitucional, siempre que se interprete en el concepto de “territorio continental, las islas, los espacios marítimos y el espacio aéreo bajo su soberanía (…) de conformidad con el articulo 54 de la Constitución”. Es decir, deberá señalarse que la soberanía y jurisdicción que le compete al estado peruano abarca el dominio marítimo que ejerce sobre las 200 millas marinas.
Igualmente, deberá incorporarse el concepto de seguridad nacional como uno de los supuestos de expropiación y hasta que ello no ocurra el Tratado es inconstitucional.
Eso es lo que teme Piñera ya que el actual gobierno ha sido concesivo y dos candidatos actuales lo serían.
¿Considera que Humala ahuyentaría la inversión extranjera y confiscaría empresas?
Ningún candidato podrá afectar la inversión extranjera, menos confiscarla. El Perú forma parte del CIADI, que es el órgano de protección de inversiones, de la OMC que resguarda la inversión, y ha celebrado una serie de tratados de protección de inversión, TPI. De tal manera que hay un andamiaje destinado a amparar, asegurar y cautelar cualquier inversión extranjera.
La gran ventaja del CIADI es que cualquier inversionista puede llevar a un Estado ante el Tribunal de Arbitraje del CIADI.
Los acuerdos de la OMC sin excepción, no solo protegen a la inversión extranjera sino que además obligan a los Estados a asegurarles sus expectativas de lucro. Esta es una innovación del derecho internacional de los últimos quince años.
¿Cuál es el margen de negociación con la inversión extranjera?
El único margen es negociar algunos contratos de estabilidad tributaria, pero ello requiere de la conformidad de las dos partes. El Estado no puede imponer, sólo proponer.
Piñera ya está metido en la campaña peruana y tiene al presidente García y a la derecha peruana como sus fieles escuderos. |
¿Pero eso no ahuyenta la inversión extranjera?
Ninguna negociación comercial asusta a un inversionista. Las transnacionales no son niños de pecho. Por otro lado, los propios estadounidenses negocian todos los contratos. Hay una cláusula, “hardship”, que posibilita renegociar un contrato cuando las condiciones varían. En nuestro sistema jurídico es la cláusula de imprevisión.
Ese es el mecanismo de renegociación contractual. Todos los países lo hacen cuando están identificados con los intereses nacionales y tienen la voluntad y dignidad de Estado, más o menos autónomo.
¿Cuál es su apreciación sobre el empresariado chileno?
Excúseme de no opinar, pues ahora defender los intereses del Perú, significa ser tildado de nacionalista trasnochado. Pero sí déjeme darle dos ejemplos evidentes que son una constante en el sentimiento y conducta del empresariado chileno.
En enero de 1988 el Gerente General de Lucchetti, Gonzalo Menéndez, dijo del exalcalde Andrade: “Este caballero se va a encontrar conmigo”, quiere ser Presidente pero yo ganaré porque “quiero una batalla sangrienta como se ganan todas las guerras”.
Ahora mismo, el jueves 31 de marzo en las páginas de un diario económico peruano (Gestión) el empresario chileno Ricardo Cabello dice que su candidato preferido es Pedro Pablo Kuczynski pero que es probable que Ollanta pase a la segunda vuelta. Sin embargo “…mientras el fantasma no esté enterrado, sigue rondando”.
Los empresarios quieren enterrar a todo aquel presidente que tenga un ápice de dignidad para defender los intereses peruanos.
Si a ello suma las declaraciones del presidente Piñera, no se requiere ser inteligente para conocer los riesgos.
¿Cree que hay una competencia Venezuela y Chile?
Fíjese Ud., toda la prensa se escandaliza porque Chávez dice ser amigo de Humala y sacan su foto. Yo sé que Chávez es impresentable pero su país nunca agredió al Perú. En cambio Piñera interviene y la gran prensa calla, a pesar que su país tiene una larga historia de conflicto y humillaciones hacia el Perú.
¿Afectaría nuestro diferendo en La Haya?
Tengo la certeza, por los precedentes jurisprudenciales, que se reconocerá la razón y el derecho del Perú; pero su ejecución dependerá de la decisión de los dos Estados. Siento que los llamados gremios empresariales en los cuales tienen gran presencia las inversiones chilenas, la media peruana (prensa y televisión) que cuidan su avisaje, la presión de los capitales extranjeros y un presidente que tuviera intereses evidentes y vínculos comerciales con Chile, podrían establecer concesiones y dilatar la ejecución para hacer de la sentencia favorable solo una victoria nominal. Hay muchas experiencias en los últimos cien años que posibilitan hacer creer que ese capítulo no se cerraría definitivamente.
Sin embargo, hay que olvidar el pasado para vivir en paz, como lo han hecho Alemania y Francia.
Esta es una expresión engañosa. Esos dos países han superado sus conflictos uniéndose en los ´50 al Tratado del Carbón y del Acero. Chile torpedeó el Acuerdo de Cartagena. Por otro lado, Alemania pidió perdón a Francia y ésta devolvió los trofeos de guerra. Finalmente, Alsacia y Lorena al fin están bajo soberanía francesa.
Hay que mirar el futuro a partir de un conocimiento de la historia para no repetirla.
Una gran mayoría de peruanos desea mantener el actual modelo económico. A partir de ello ¿cuál es el candidato que mejor asegura el modelo económico?
En primer lugar, no es cierto que la gran mayoría quiera mantener el modelo primario-exportador que trae indudables ingresos, pero para una minoría. Lo que ocurre es que esa minoría controla los medios y es la única voz que se escucha. Lo hace con estridencia y dogmatismo impidiendo el más mínimo movimiento o cruce de opiniones. Sin embargo, la cuestión social y educativa sigue siendo un gravísimo problema.
¿Por quién votaría Ud.?
Sólo le puedo decir que no votaría por ninguna “K”. Huele feo.
La Primera, 05.04.2011.