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Tras la violencia de ayer después de la modificación de la ley del canon, el día de hoy la situación en Tacna todavía no está totalmente controlada pues hay diversos brotes menores. El recuento de los estragos de ayer es lamentable: diversos locales estatales fueron blanco de la ira del pueblo y de agitadores que aprovecharon la indignación para cometer sus fechorías.
Una de las pérdidas más lamentables fue la causada por el incendio del edificio de la gobernación, pues es monumento histórico. Los antisociales quemaron muebles y abundante documentación que se archivaba. Este fue el primer local atacado, tan sólo minutos después de conocerse el resultado de la votación del canon en Lima.
Radio Uno pagó el precio de su moderación
Otros inmuebles dañados fueron el local de la SUNAT, del Poder Judicial, del Partido Aprista y la sede de Radio Uno, contra la cual se enfurecieron las turbas por no aprobar la violencia, pues la radioemisora mantuvo una línea moderarada, aprobando la defensa de los intereses de Tacna pero desalentando la violencia.
Las incidencias personales dan cuenta de 18 policías y 4 civiles heridos, además de 7 peruanos detenidos por haber traspasado la frontera y haber ingresado a Chile.
El total de 300 policías designados para controlar el orden fue desbordado por las turbas en distintas zonas. En el complejo fronterizo Santa Rosa, medio millar de obreros de construcción civil impidieron el paso de vehículos y sólo permitían el tránsito de ómnibus internacionales.
El control de los disturbios se realizó con bombas lacrimógenas. Los policías estuvieron apoyados por la caballería. El local de la gobernación fue el más afectado. Los otros locales fueron apedreados y hubo robo de algunos aparatos.
Los detenidos en Chile
En cuanto al grupo de siete ciudadanos detenidos en Chile, ya fueron liberados por la policía chilena. Ellos manifestaron que se encontraban sentados a pocos metros del punto Concordia y que no realizaron ningún acto de violencia, no obstante, denunciaron haber recibido maltratos en Chile.
Según el Frente de Defensa de los Intereses de Tacna, José Mejía, los actos de violencia responden a infiltrados organizados que aprovecharon el caos para desatar la destrucción. Aseguraron que esos personajes son desconocidos. Incluso varios de ellos estaban enmascarados.
Paulatinamente, todos los focos de violencia fueron apagados al final de la tarde. En la noche se realizó una vigilia en el Paseo Cívico.
El agua
Para desfogar su indignación frente a lo que consideran que fue una medida que favoreció a Moquegua, pobladores de los distritos de Inclán, Sama, Locumba e Ite, quienes en la mañana habían anunciado el bloqueo del suministro de agua a Ilo, cumplieron su designio de destruir la bocatoma de Ite, que alimenta a Ilo con 150 litros de agua por segundo.
